El origen de las croquetas
Hablamos con Ana Vega, la Biscayenne en Twitter, de la historia de uno de los platos tradicionales más importantes de nuestra gastronomía: las croquetas
Las croquetas son uno de los productos estrella de la gastronomía española, además de porque su consumo está extendido por toda la geografía nacional, por lo lejano que queda en el tiempo su origen y lo sencilla que resulta su receta.
Su nombre siempre es motivo de controversia, especialmente en los terrenos más rurales, que tradicionalmente las han designado más como "cocretas" que con su nombre original. Sin embargo, como nos cuenta Ana Vega, su uso está aceptado por la RAE como forma vulgar, por lo que es correcto utilizarlo.
El origen de las croquetas
El origen etimológico de la palabra proviene del verbo francés 'croquer', que significa crujir, que derivándolo a adjetivo diminutivo en femenino, encontramos la palabra 'croquette', que traducido al español es 'crujientita'.
Las croquetas tienen su origen en Francia, y, como nos cuenta Ana Vega "son mucho más antiguas de lo que la gente suele pensar". La primera receta de croquetas apareció en un libro de recetas en el año 1691, escrita por un famoso cocinero francés que servía para el Duque de Orleans, y que ya la reconocía como un entrante.
La receta original
Sin embargo, la receta original eran empanadas y por dentro contenían una pasta hecha de carne picada, huevos, hierbas y otras especias, sin bechamel, ya que no ésta no aparecía en la literatura culinaria hasta el 1733.
Las primeras que conocimos en España eran dulces, ya que por dentro tenían arroz con leche y estaban fritas con huevo y pan rallado, como las que conocemos ahora.
Posteriormente derivaron en el producto dulce que consumimos en la actualidad, y que están hechas a base de bechamel, mezcladas con pescado, cocido, queso o las tradicionales y famosisímas croquetas de jamón.