"Una persona con renta de más de un millón de euros tributa igual que un trabajador que gana 38.000"
José María Mollinedo, Secretario General de los Técnicos de Hacienda, justifica en Herrera en la onda la subida de impuestos ya que considera que se ha recuperado la igualdad y la progresividad para poner un coto a la economía sumergida y acabar con la misma tributación de personas con diferentes salarios:" una persona que obtiene rentas de más de un millón de euros tiene una tributación equivalente a un trabajador que gana 38.000 euros".
El secretario general del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA), José María Mollinedo, ha sido entrevistado esta mañana en el programa Herrera en la Onda, de ONDA CERO. Estas han sido sus respuestas a las preguntas de Carlos Herrera sobre la política fiscal y el incremento del IRPF.
SUBIDA DEL IRPF
“Ahora nos hemos dado cuenta de que el impuesto de la renta recae precisamente sobre las personas que ganan menos de 53.000 euros, que aproximadamente es el 95% de la población. Este gravamen es progresivo y así se lo reconocemos al nuevo Gobierno”.
AQUÍ SIEMPRE NOS ACABAMOS PREGUNTANDO ¿POR QUÉ NO SE GRAVA MÁS A LOS GRANDES PATRIMONIOS?
“El problema de los grandes patrimonios es que no están retratados en el impuesto de la renta. Quien posee un gran patrimonio tiene sociedades instrumentales donde situar ese patrimonio y las rentas que se obtienen recaen en esas sociedades y no en la persona titular de esos bienes. Así, quien tenga un gran patrimonio, en viviendas, en inmuebles, puede constituir una sociedad patrimonial. De esta forma se ahorra el 2% del valor catastral de esas viviendas que tiene a su disposición. El catálogo de gastos deducibles también es mucho más amplio que en el IRPF. Si además tiene acciones, va a constituir una Sicav, donde todas las plusvalías se van a quedar ahí a resguardo. No van a tributar, van a quedar latentes hasta el momento en que reintegre su participación. De las 3.100 Sicav que tenemos contabilizadas, el 70% está en manos privadas, con lo cual estas personas nunca van a rescatar su participación y nunca van a tributar por la renta”.
¿POR QUÉ, EN LUGAR DE CONTROLAR MÁS A LAS PEQUEÑAS EMPRESAS, NO SE CONTROLA A LAS GRANDES EMPRESAS?
“Este es un problema que venimos denunciando a las distintas autoridades económicas a lo largo de los últimos años. La Agencia Tributaria aprueba unos planes de investigación clásicos, que son los que se crearon a principios de los noventa y que dan buen resultado. Estamos investigando con mucha exhaustividad a los pequeños contribuyentes y así se consigue el 20 o el 30% de los objetivos”.
¿A USTEDES LES PARECEN BIEN LAS MEDIDAS DE AJUSTE DEL GOBIERNO?
“En lo que atañe a las partidas de aumento de impuestos, nos parecen positivas. Durante las dos últimas décadas, el sistema fiscal había perdido dos principios importantes: la igual y la progresividad. No todos los ciudadanos contribuyen igual. Tenemos una de las tasas sumergidas más altas de Europa y el nuevo plan que anuncia el Gobierno puede poner coto a esta situación. La progresividad mejora sustancialmente con estos dos nuevos gravámenes complementarios, particularmente el gravamen sobre la renta de capital. Una persona que obtiene rentas de más de un millón de euros tiene una tributación equivalente a la de un trabajador o un autónomo que gana 38.000 euros”.
¿NO HABRÍA QUE PERSEGUIR MÁS LA ECONOMÍA SUMERGIDA?
“Nosotros venimos reclamando un cambio de actitud total en la Agencia Tributaria. Los objetivos no pueden marcarse sobre los del año anterior, sino marcarlos las Cortes Generales, sobre una tasa de reducción de la economía sumergida, para conseguir en unos años acercarnos a la media europea. De esta manera, conseguiríamos recaudar 38.500 millones de euros. Y esto supondría casi el doble de lo que se recauda con el impuesto de sociedades. Actualmente, quien paga sus impuestos correctamente está pagando 830 euros de más, para compensar la evasión fiscal de otros. Esto se debe corregir”.