Asegura que "si se presenta impreso, tiene una validez prácticamente nula porque es susceptible de manipulación", pero que "si se presenta en forma digital y acompañado de un análisis forense, se puede hacer un análisis de integridad y ver si los datos que acompañan al correo, nos dicen si ha sido manipulado".
Establece que es muy fácil falsificar un email de entrada, "se puede coger ese correo, exportarlo, editarlo y cambiarlo sin ningún problema". La diferencia estaría en que "si se presenta ese correo en formato digital, se podrá estudiar la manipulación". No obstante, comenta que, además, "es importante que haya habido una cadena de custodia correcta, porque si no, sería muy complicado demostrar algún tipo de manipulación".