Enric Gasa Valga: "Innsbruck une la belleza y el dinamismo de una ciudad pequeña, pero carismática"
En Gente Viajera, descubrimos Innsbruck de la mano de Enric Gasa Valga, director artístico del Teatro Nacional Tirolés en Innsbruck (Tiroler Landestheater).
Hoy viajamos a un destino donde casi se puede tocar el cielo. En Gente Viajera conocemos Innsbruck, la perla de los Alpes. Es una ciudad imperial, elegante y sofisticada, donde los amantes del esquí y del turismo de montaña encuentran su sitio todo el año. Es un lugar que atrapa y enamora.
Nos habla sobre este destino Enric Gasa Valga, director y coreógrafo del Teatro Nacional Tirolés de Innsbruck (Tiroler Landestheater). Durante su activa carrera como bailarín de ballet, ha sido invitado a teatros y galas de todo el mundo. En 2003, con tan solo 27 años, fundó un festival internacional de danza en Barcelona, que ha estado en marcha durante siete años.
Nos cuenta los motivos de por qué dejó Esparraguera (Cataluña) para iniciar una vida en esta ciudad de Austria. "Son 27 años fuera de Esparraguera. Estaba trabajando como bailarín invitado en diferentes teatros. Una vez me llamaron de Innsbruck y después de bailar me ofrecieron un contrato para quedarme y dirigir la compañía de ballet".
Gasa nos ha dado más detalles de cómo son las calles de la ciudad y cómo le inspiran a la hora de hacer su trabajo: "Sales a la calle y hay gente de todo el mundo. Es una ciudad muy viva porque hay muchísimos universitarios, alrededor de 30.000 al año y hay mucha actividad para gente joven. Es un lugar vibrante, internacional, con diferentes culturas. Une la belleza y el dinamismo de una ciudad pequeña, pero muy carismática".
Los viajeros pueden coger el funicular y luego el teleférico para llegar a lo más alto del parque natural de Austria. Enric nos desvela que este es uno de sus rincones favoritos de Innsbruck: "Es un lugar perfecto. Puedes subir a esquiar o, por ejemplo, en verano hay un dj en la montaña y bajo las estrellas puedes disfrutar de una noche con música donde tomar una copa y bailar".
Una ciudad en la que prima la cultura y el deporte
Por otro lado, nos comenta que Innsbruck es un lugar para todo el mundo. "El mundo del deporte aquí es algo que la población vive muy ardientemente. Hay fanatismo por ir a la montaña cada día, de caminar o de ir a esquiar. En cuanto a nivel cultural, no hay día que no se pueda ir a un concierto, un ballet, una obra de teatro o una ópera. Es una ciudad muy activa en esos dos ámbitos", señala.
El Castillo de Ambras
El archiduque Fernando II mandó construir el Castillo de Ambras en los terrenos de un palacio medieval como refugio para su esposa secreta, Philippine Welser. El Castillo de Ambras permite a sus visitantes adentrarse en el mundo del siglo XVI y de la vida de la dama del palacio. Asimismo, es el primer museo del mundo que permite sumergirse en valiosos tesoros artísticos.