EN BUENAS MANOS

Pisar bien es clave para evitar o prevenir lesiones corriendo

Tal y como recoge OK Diario, un análisis exhaustivo del pie y la pisada que puede arrojar información primordial para conocer su relación con otras estructuras como rodilla, cadera, columna… y que nos dirá como adaptar nuestro pie a la zapatilla, qué tipo nos conviene, e incluso si necesitamos una plantilla específica para correr.

Redacción

Madrid | 31.01.2024 10:11

Pisar bien es clave para evitar o prevenir lesiones corriendo | Redacción

A menudo no les prestamos la atención suficiente pero nuestros pies sufren la carga diaria de todo nuestro cuerpo, así que deberían estar siempre en las mejores condiciones. Pisar de forma adecuada puede salvarnos de sufrir alteraciones posturales, y en caso de ser corredores, puede resultar esencial para reducir el impacto que reciben nuestros pies, evitar o prevenir posibles lesiones, y enfrentarnos con total seguridad a carreras de media y larga distancia como la Media Maratón de Sevilla que se acaba de disputar y de la que Quirónsalud es Healthcare Partner.

Una carrera en la que estaban inscritos más de 14.000 corredores que seguramente se hayan realizado con anterioridad un estudio biomecánico de la pisada, tal y como recomiendan los especialistas, para tener la garantía de que sus pies tienen una buena distribución de carga, evitando gestos biomecánicos inoportunos, que nos evita las temidas lesiones y nos ayuda a obtener un mayor rendimiento deportivo.

Tal y como recoge OK Diario, un análisis exhaustivo del pie y la pisada que puede arrojar información primordial para conocer su relación con otras estructuras como rodilla, cadera, columna… y que nos dirá como adaptar nuestro pie a la zapatilla, qué tipo nos conviene, e incluso si necesitamos una plantilla específica para correr.

Desde Quirónsalud, Claudio Domínguez Pérez, de la Unidad de Podología y estudio biomecánico de la pisada del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, explica que este examen tiene como finalidad «definir si existe un patrón de normalidad, o, por el contrario, alguna patología en la pisada del paciente respecto a su forma de caminar, correr o realizar el gesto biomecánico de las distintas disciplinas deportivas, que pueda producir dolores o lesiones».