EN BUENAS MANOS

Diez consejos para una vuelta a la rutina saludable

“Después del verano y el descanso, muchos de nosotros hacemos acrobacias para encajar las obligaciones laborales con las agendas de los niños y la gestión familiar. Afrontar la vuelta a la rutina puede desencadenar sintomatología ansiosa, sentimientos de tristeza, apatía, fatiga mental y física e incluso somnolencia”, explica Belén Vázquez, psicóloga del hospital Ribera Polusa (Lugo).

Redacción

Madrid | 06.09.2022 10:32

Diez consejos para una vuelta a la rutina saludable | Redacción

Especialistas en Salud Mental del grupo sanitario Ribera recomiendan, en la medida de lo posible, una vuelta progresiva a la rutina del trabajo o los estudios para evitar los síntomas que en ocasiones acompañan a quienes terminan sus vacaciones estos días. “Después del verano y el descanso, muchos de nosotros hacemos acrobacias para encajar las obligaciones laborales con las agendas de los niños y la gestión familiar. Afrontar la vuelta a la rutina puede desencadenar sintomatología ansiosa, sentimientos de tristeza, apatía, fatiga mental y física e incluso somnolencia”, explica Belén Vázquez, psicóloga del hospital Ribera Polusa (Lugo).

Cristina Díaz, enfermera especialista en Salud Mental del Hospital Universitario de Torrejón, añade como síntomas típicos de la dificultad para volver al día a día irritabilidad, desmotivación, falta de atención, memoria y concentración, pensamientos negativos, baja autoestima, inseguridad y problemas de sueño o apetito. Sobre todo, asegura, “se identifican estos síntomas en personas con tendencial al control y perfeccionistas, obsesivos y personalidades fóbicas, temerosas y evitativas”.

Para intentar evitar esta sintomatología o moderarla, los especialistas en Salud Mental del grupo Ribera facilitan diez consejos para una vuelta a la rutina saludable. Pero insisten en que si los síntomas se prolongan o nos superan, es importante pedir ayuda a un especialista.

· Evitar, en la medida de lo posible, la vuelta brusca. No es buena idea reincorporarse a las pocas de horas de bajar de un avión.

· Hacer una lista de prioridades, de mayor a menor urgencia.

· Organizar los días y semanas con cierta flexibilidad.

· No mezclar horarios de vacaciones y de rutina de trabajo y mantener horarios regulares de sueño.

· Paciencia. No desesperarse por estar al 100% nada más llegar. Darnos tiempo para equilibrar las demandas del trabajo diario y organizar la vuelta.

· Asumir que, aunque cueste, nos adaptaremos como cada año. Pedir ayuda si hace falta.

· Incorporar o retomar actividades deportivas y/o de ocio que ayudan en la sensación de orden y horarios.

· Poner en valor los momentos agradables y divertidos en el trabajo, como el reencuentro con compañeros o los proyectos laborales ilusionantes.

· Evitar la queja continua. No aporta nada positivo y puede enturbiar el ambiente de trabajo.

· Aceptar y entender cómo nos sentimos y aprender a tratarnos con amabilidad y cariño.