En este especial no ha faltado la quinta ce, la más esencial en todos los aspectos de la vida de Cebrián: la codirectora y copresentadora de 'La rosa de los vientos', Silvia Casasola.
"Me remueve y me rompo pero también lo disfruto, es simpatía y dolor", asegura Silvia sobre lo que supone para ella recordar la figura de Juan Antonio. Vivieron multitud de aventuras juntos en la radio y la periodista rememora como fueron sus inicios: "Nos quedábamos a dormir en un sofá en la entrada de la emisora para hacer un programa que se llamaba 'Kilómetro cero'. Pero los primeros de él son todavía más graciosos".
Tenía multitud de cualidades que le hicieron ser un auténtico referente para muchos: "Era perfeccionista pero muy de sentimiento. Quería que un invitado se sintiera como en casa. Como si fuera una charla entre amigos. A los 13 años perdió la visión de un ojo y aprendió a tener sentido del humor para afrontar las bromas típicas, antes de que tú me digas, me lo digo yo. Y tenía un don, decía las cosas sin que te ofendieras".
Y destaca otro punto que ella tuvo el gran privilegio de vivir, el verle hacer radio en directo: "Si Juan Antonio hubiera retransmitido en streaming aquellos programas, hubiera tenido un montón de audencia. Era un espectáculo".