Se acerca la Semana Santa y si hay algo que no puede faltar en la mesa de los españoles son las torrijas. Este postre es el más popular de estas fechas y aunque su preparación es sencilla y rápida, también esconde algunos secretos para que quede perfecta.
Algo que surgió como una receta de aprovechamiento se ha convertido en un postre que va más allá de los días festivos y que se perfecciona con el tiempo.
Uno de los trucos que hacen que este dulce típico de estas fechas quede más sabroso, lo desvela el cocinero Karlos Arguiñano en su libro 'En Familia'.
La clave para que la torrija quede más sabrosa es el infusionado con especias.
El chef guipuzcoano aconseja infusionar el aceite ya caliente con una cáscara de limón. "En una sartén con abundante aceite, añade una corteza de cáscara de limón", explica el chef de Beasain. Este truco dejará impregnadas las torrijas con esta potencia sin apenas esfuerzo.
Así se consigue que los aceites esenciales de la piel de del cítrico se expanda más y potencie el sabor de las torrijas. Además, hay que recordar que siempre que utilicemos pieles de cítricos en la cocina, conviene utilizar solo la corteza y prescindir de la piel blanca interior, ya que amarga.
Si se opta por este truco, el aceite no servirá para otras preparaciones.