Las nuevas vacunas contra la Covid-19 ya son eficaces contra las nuevas variantes de Ómicron, un aspecto que preocupaba a los expertos, debido a la facilidad con la que mutaba el virus. Las principales agencias de medicamentos ya las han aprobado, por lo que estas comenzarán a inocularse a partir de este mismo otoño.
Sin embargo, los científicos siguen preocupados de que estas nuevas vacunas pierdan efectividad en un futuro contra las variantes que aún están por llegar. Por eso, el descubrimiento de un grupo de investigadores de Tel Aviv (Israel) podría dar un giro radical a esta preocupación.
Y es que este grupo de científicos ha hecho un nuevo hallazgo sobre el virus y la gente que ya lo ha padecido que eliminaría la necesidad de vacunarse con dosis de refuerzo actuales y abriría la puerta a poder dejar de hacerlo con las dosis que se fabricarían por nuevas variantes aún inexistentes.
Según elestudio publicado en la revista 'Nature Communications Biology', el equipo ha demostrado que los anticuerpos aislados del sistema inmunitario de los pacientes que se han recuperado del Covid-19 son eficaces para neutralizar todas las cepas conocidas del virus, incluidas las variantes Delta y la última, Ómicron.
¿Y cómo es posible esto? Porque el estudio es una extensión de otro que ya se realizó en octubre de 2020, en pleno momento crítico de la pandemia del Covid. En ese momento, se secuenciaron todas las células del sistema inmunitario B de la sangre de los que se han recuperado de la primera cepa y se aislaron nueve anticuerpos. Ahora, algunos de esos anticuerpos pueden neutralizar las nuevas variantes Delta y Ómicron.
Tal y como explica la doctora Natalia Freund, principal autora del estudio, los anticuerpos más eficaces eran los que se unían a la proteína espiga del virus. "En el estudio actual, demostramos que otros dos anticuerpos que se unen a la proteína viral de la espiga en una zona diferente de la región en la que se concentraban son en realidad muy eficaces para neutralizar las variantes", asegura la experta.
Los investigadores identificaron dos anticuerpos:
"Por razones que no comprendemos del todo, el nivel de anticuerpos contra el Covid disminuye después de tres meses, por lo que vemos personas que se reinfectan incluso después de haber sido vacunadas tres veces. Por lo que el tratamiento dirigido con anticuerpos y su entrega en altas concentraciones puede servir como sustituto eficaz para los refuerzos de las vacunas", afirma, para concluir que "es posible que al usar este tratamiento no se tenga que proporcionar dosis de refuerzo a toda la población cada vez que haya una nueva variante".