Una alimentación saludable y equilibrada permite al organismo obtener los nutrientes necesarios para funcionar correctamente y, sobre todo, mantenerse sano. Por el contrario, cuando el cuerpo no recibe las vitaminas y proteínas correctas puede desarrollar enfermedades o padecer algún síntoma.
Un ejemplo de ello, es el frío, cuando tenemos las manos y los pies fríos constantemente puede que el cuerpo nos esté avisando de que tenemos déficit de alguna vitamina, como la B12.
Según explican desde el instituto Johns Hopkins Medicine, la deficiencia de la vitamina B12 hace que no haya suficientes glóbulos rojos, que reparten en oxígeno por el organismo, haciendo que el cuerpo no funcione con normalidad. Es decir, puede desencadenar en una anemia.
Entre los principales síntomas de la anemia está el frío constante en las extremidades del cuerpo:
Aunque es recomendable ingerir alimentos ricos en vitamina B12, en el caso de tener anemia o creerlo hay que acudir al médico para verificar su diagnóstico y tratamiento.