Los contagios de Covid-19 han vuelto a repuntar en nuestro país. Cuando parecía que habíamos superado la pandemia y recuperado normalidad previa a 2020, las nuevas variantes del virus han provocado un notable aumento de la incidencia y las hospitalizaciones en las últimas semanas.
Según el último informe publicado por el Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada (IA), entre mayores de 59 años, se ha disparado hasta los 841 casos (86 puntos más).
Asimismo, los expertos alertan del incremento en la ocupación hospitalaria, que ya se sitúa en el 7,79%, con 9.553 personas ingresadas. Y en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de nuestro país también ha habido un repunte de pacientes, pasando en tan solo dos semanas del 3,8% al 5% de ocupación, con 433 personas.
Por suerte, la tasa de mortalidad ha descendido al 3,9%. Durante la última semana, 152 personas han fallecido coronavirus, por lo que la cifra total de fallecidos desde que comenzó la pandemia en marzo de 2020, ha subido hasta los 107.906.
Los datos del último parte de Sanidad indican que España está inmersa en una séptima ola de coronavirus. Sin embargo, los expertos apuntan que el virus ha cambiado y es muy diferente al original, tanto, que ya "podemos comenzar a hablar de Covid-22", aseguró recientemente el viceconsejero de Asistencia Sanitaria y Salud Pública de la Consejería de Sanidad Antonio Zapatero.
Las subvariantes de Ómicron BA.4 y BA.5. son las responsables de este incremento exponencial en el número de casos. Ambos linajes se expanden por toda la geografía nacional y ya representan entre 5,4% y el 64,9% de las muestras secuenciadas. En concreto, BA.5 ya es dominante en la mayoría de las comunidades autónomas, excepto en Castilla-La Mancha y Canarias.
Estas subvariantes presentan una ventaja de crecimiento sobre el linaje predominante BA.2. Su mayor capacidad de evasión a la respuesta inmune contribuye a un aumento de las reinfecciones y las infecciones en personas vacunadas, apuntan los expertos.
Las variantes BA.4 y BA.5 presentan los siguientes síntomas:
En cuanto a su duración, un estudio de la Sanidad Pública Francesa señala que los síntomas con BA.4 y BA.5 se reducen a cuatro días frente a los siete de Ómicron BA.1.