Respirar por la nariz o vestir varias capas entre las recomendaciones de Sanidad ante el frío
El ministerio de Sanidad ha publicado una serie de medidas de protección ante las bajas temperaturas
Respirar por la nariz para que el aire se caliente al pasar por las fosas nasales, vestir varias capas de ropa fina en lugar de una sola gruesa, o consumir diariamente fruta , y sobre todo agua y bebidas calientes; son algunas de las recomendaciones del Ministerio de Sanidad para hacer frente a las bajas temperaturas.
En un documento emitido por Sanidad, se destaca la necesidad de conocer antes de salir de casa cuál es la previsión meteorológica y sugiere nueve medidas de protección para evitar las situaciones más frecuentes ante las bajas temperaturas, incluidas en el nuevo Plan Nacional de Actuaciones Preventivas por Bajas Temperaturas 2022-2023.
El frío intenso, más grave que el calor extremo
Desde el Ministerio se advierte de que el frío intenso afecta de forma negativa la salud y, aunque sus efectos no se producen de una forma tan aguda y repentina como los de las altas, se trata de un factor de riesgo ambiental considerable, cuyo impacto en la salud puede ser incluso más grave que el del calor extremo.
El efecto más frecuente del frío intenso es el sobre estrés del organismo, que puede dar lugar a una descompensación orgánica y agravar enfermedades crónicas en población vulnerable y, en casos extremos, hipotermia o congelación, según dicta el documento de Sanidad.
El ministerio que dirige Carolina Darias subraya también que con el frío se producen más accidentes de tráfico y caídas por placas de hielo, por lo que se recomienda extremar la precaución al volante y usar calzado antideslizante.
Además, advierte sobre los incendios e intoxicaciones por monóxido de carbono a partir de estufas de gas o braseros y resaltan la conveniencia de ventilar la casa al menos dos veces al día durante 15 minutos para evitar la acumulación de CO2 y renovar el aire.
El Plan Nacional de Actuaciones Preventivas por Bajas Temperaturas se pone en marcha para reducir el impacto del frío sobre la salud de la población, especialmente entre los grupos más vulnerables.