Esta mañana se conocía la noticia de que dos hombres, de 22 y 34 años, e 'influencers' de profesión, han sido detenidos en Madrid por la Policía Nacional acusados de agredir sexualmente al menos cuatro chicas menores de edad, a las que drogaban para anular su voluntad.
Estos dos individuos, que cuentan con miles de seguidores en redes sociales, grababan las agresiones con sus teléfonos móviles y varias cámaras de seguridad también captaron los actos, aunque los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM), a cargo de la investigación, no tienen conocimiento de que los compartiesen con terceras personas, ha informado este martes la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Al parecer, los detenidos aprovechaban su popularidad para atraer a las menores hasta la vivienda de uno de ellos, en el distrito madrileño de Villa de Vallecas, donde primero les hacían partícipes de juegos que implicaban el consumo de drogas y luego, una vez que dejaban de ser conscientes de lo que sucedía, las agredían sexualmente.
La investigación comenzó el pasado mes de diciembre tras recibir la Policía una denuncia del entorno próximo de los dos varones, acerca de las posibles agresiones sexuales a menores que se estaban cometiendo en uno de sus domicilios.
Los dos arrestados son Jose Hernan A. G. e Iván y pertenecen al dúo 'Petazetaz', muy populares en 'TikTok' donde suman miles de seguidores, más de 30.000, y en Instagram más de 40.000.
En sus perfiles, suelen publicar contenido de "humor" y entrevistas en discotecas y otros lugares de moda. Se definen como "un dúo un tanto peculiar" que toma su nombre de la popular marca de caramelos.
Tras las primeras pesquisas, la Policía ha identificado, de momento, a cinco víctimas, aunque no descartan que haya más, ya que la investigación policial y la fase de instrucción del juzgado sigue abierta y los agentes están pendientes de analizar el contenido de los dispositivos que intervinieron en uno de los domicilios de uno de los presuntos autores.
El 24 de enero pasado los agentes establecieron un dispositivo para localizarlos y detuvieron a los dos sospechosos.
A uno de ellos se le imputan dos delitos de agresión sexual, cinco contra la salud pública y uno de violación, exhibicionismo y pornografía infantil y al segundo uno de agresión sexual.
En la citada vivienda la Policía intervino numerosos dispositivos electrónicos de almacenamiento, diferentes cantidades de estupefacientes y dos teléfonos móviles.
Tras su paso a disposición judicial se decretó a finales de enero el inmediato ingreso en prisión para el mayor de ellos, pero ha quedado en libertad provisional esta semana tras un recurso de sus abogados hasta el juicio.