Los frutos secos son un imprescindible en la dieta mediterránea gracias a la gran cantidad de grasas saludables y proteínas que aportan, lo que los hace muy beneficiosos para nuestra salud. Su consumo es cada vez mayor en aquellos concienciados con llevar una dieta saludable debido a los nutrientes que nos aportan. Algunos de los más recomendables son: almendras, nueces, pistachos, avellanas, cacahuetes y anacardos.
Otra de las recomendaciones para conservarlos correctamente es congelarlos, de manera que puedan aguantar mucho más tiempo y así no ponerse rancios. La clave estaría sacarlos del congelador, meterlos en la nevera y después sacarlos a temperatura ambiente 15 minutos antes de consumirlos.
¿Y cuánto tiempo duran congelados? En términos generales, suelen durar entre 9 y 12 meses, siempre que se conserven correctamente. Lo ideal es almacenarlos en un recipiente hermético bien cerrado y, como consejo, hacerlo en pequeñas porciones para luego sacar únicamente las que nos vayamos a comer.