La Policía Nacional ha subrayado que el cuerpo de Álvaro Prieto, el joven cordobés desaparecido el pasado 12 de octubre y cuyo cadáver se encontró el lunes electrocutado por una catenaria de la estación sevillana de Santa Justa, quedó "completamente oculto" entre dos vagones hasta que se produjo "el movimiento del tren" donde finalmente se halló.
En una nota, la Policía ha relatado de forma pormenorizada las fases de la investigación, en la que, subraya, "se siguió en todo momento el procedimiento establecido para este tipo de hechos".
Explica que sobre las 20:00 horas del día de la desaparición, se estableció contacto con centros hospitalarios, asistenciales... "Se chequean las personas detenidas" y se "realizan gestiones varias, por si se hubiese registrado algún incidente con esta persona", añade.
El día 13 de octubre por la mañana, tras las infructuosas gestiones anteriores, comenzó la "búsqueda con la reconstrucción de los últimos movimientos del desaparecido" y se procedió a la búsqueda de testigos y a la petición de imágenes de seguridad a los establecimientos próximos a la estación de Santa Justa.
En este sentido, se trabajó sobre "varios avistamientos que resultaron negativos", se solicitaron "mandamientos de localización del teléfono" y otras gestiones como la "solicitud de examen por parte de Renfe de las vías y de los trenes que habían transitado por esas vías durante la franja horaria de interés".
Posteriormente, el 14 de octubre se realizó una búsqueda amplia por las inmediaciones de Santa Justa con agentes de la Policía Nacional, personal ferroviario y de la Unidad de medios aéreos (helicóptero y drones). La búsqueda llegó hasta el término municipal de Carmona (Sevilla) y a bordo de un tren hasta Córdoba.
Tras el resultado negativo, el domingo 15 de octubre se centró la búsqueda, más "exhaustiva y pormenorizada" en las inmediaciones de la estación de Santa Justa, a la que se incorporó personal y medios de la unidad canina de la UME especializados en la búsqueda de personas y que se concentraron en la parte soterrada que comunica la estación con San Bernardo.
A la mañana siguiente, lunes, el dispositivo conjunto de búsqueda con la UME continuó en las inmediaciones de la estación de Santa Justa y se dispuso para la búsqueda en la zona de talleres y vías próximas en dirección hacia Córdoba. Pero antes de llegar al lugar se produjo el hallazgo del cadáver.
La Policía ha señalado que, tras el visionado ese mismo día de una cámara de un establecimiento próximo, "que fue entregada a los investigadores el domingo por la tarde", se observa como el joven se sube a la "parte superior de un tren trepando justo por la intersección entre los dos vagones".
Una vez en su parte superior "instantáneamente cae fulminado al interior del hueco existente entre los dos vagones, donde quedó completamente oculto hasta que se produjo el movimiento de dicho tren la mañana del lunes", concluye el escrito.
La autopsia practicada al cadáver de Álvaro Prieto ha confirmado que el joven cordobés murió electrocutado.