Juicio del caso Alvia: El exdirectivo de Adif niega competencias para evaluar los riesgos y descarga responsabilidades
Se ha retomado el juicio por el accidente del Alvia en el que murieron 80 personas. Ha sido el turno para el segundo de los acusados, Andrés Cortabitarte, el que era responsable de seguridad de ADIF.
El que era responsable de seguridad de ADIF ha negado que tuviera competencias para evaluar los riesgos y ha cargado toda la responsabilidad sobre el maquinista. Según su versión, el exceso de velocidad fue el motivo del descarrilamiento y atender una llamada de teléfono, la razón que no pudiera reaccionar a tiempo
El ex director de seguridad en la circulación de Adif, Andrés Cortabitarte, acusado en el juicio por el accidente del tren Alvia ocurrido en Angrois (Santiago) en julio de 2013, ha asegurado que no tenía competencias en la evaluación de riesgos de la línea.
A preguntas del fiscal, en el juicio por el que también está acusado el maquinista --a ambos se le imputan 80 homicidios por imprudencia profesional grave--, Cortabitarte ha negado que la dirección de seguridad, al frente de la cual estaba, tuviera responsabilidad en "la evaluación ni el análisis de ningún riesgo".
En cualquier caso, ha admitido que "sí, entre otras cosas", tenía competencias en la seguridad de la línea Ourense-Santiago, en la que se produjo el siniestro, en el que murieron 80 personas y resultaron heridas más de un centenar personas.
A cuestiones sobre el certificado de seguridad, ha señalado que el que emitió él "no es el certificado de seguridad de la línea", si bien ha reconocido que sin este documento, la línea no podría ponerse en servicio. "Porque es uno más de los cuatro, seis... ocho certificados que se emiten ahí. Es uno más. Todos son necesarios", ha resuelto.
En una declaración que se ha prolongado durante en torno a una hora y 40 minutos, Cortabitarte ha alegado que el diseño de la curva de A Grandeira se acometió "con un margen de velocidad" y "seguridad" de entre 80 y 160 kilómetros por hora.
Esto quiere decir, tal y como ha proseguido, que "no pasaba nada" si el convoy circulaba a más de 80 kilómetros por hora, porque hasta los 160 "el administrador y la normativa asume los errores de conducción". "Por encima de 160, ya es otro riesgo", ha añadido el exresponsable de seguridad de Adif.
Descarga responsabilidades en la unión temporal de empresas Siemens y Dimetronic
Durante su declaración, el ex alto cargo de Adif ha descargado responsabilidades tanto en la unión temporal de empresas (UTE) que conformaban Siemens y Dimetronic --encargada de entregar un dosier de seguridad a Adif-- como en el evaluador independiente, Ineco, que hizo otro análisis de riesgos.
"Que la UTE elabore el dosier de seguridad y luego haya una evaluación independiente no significa que ustedes tengan que aceptar eso sin más", la ha llegado a reprender el fiscal, para atribuirle una "actuación pasiva".
"No, no es así. Nosotros no vamos a evaluar al evaluado. Eso es un hecho fundamental. La UTE Siemens-Dimetronic cuando hacen el dosier de seguridad lo hacen a través de un proceso", se ha escudado Cortabitarte.
Dando largas explicaciones ante el interrogatorio concreto del fiscal, también ha diluido responsabilidades en el seno de su empresa al afirmar que "no hay una sola persona que firme" un certificado de puesta en servicio de la línea. "No la vamos a encontrar en el Adif", ha dicho, antes de insistir en que el suyo es "una parte", que ha circunscrito, además, al subsistema de control, mando y señalización.
El maquinista iba "distraído"
"Lo que nadie puede prever es que un tren que viniera por allí podría pasar a más de 100", ha criticado, cargando contra el maquinista. A su juicio, es "impensable" que "alguien en el sitio más importante de una línea como es la entrada en una estación esté diciéndole al tren oye estoy bien, estoy bien, estoy bien (por el botón del hombre muerto) y sin embargo estoy distrayendo hablando por teléfono engañando al tren con el hombre muerto diciéndole estoy bien cuando no es así".
En esta línea, ha apelado al conocimiento, la formación y la experiencia del maquinista, que "en todo momento sabe dónde tiene que empezar a frenar". "¿Ahora está normativizado de otra forma? Sí, se ha normativizado de otra forma todo ello. Antes no existía eso, señor fiscal", ha alegado.
También ha indicado que hubo pruebas con el tren en esa línea e inspecciones pero que no detectaron fallos, si bien no participaba Adif ni su dirección, y ha restado relevancia al aviso que hizo un jefe de maquinistas.
Ha apuntado, eso sí, a reuniones que realizan órganos entre Adif y Renfe y que plasman "particularidades o deficiencias del sistema" para analizar si hay que realizar "inversiones" o "mitigar" carencias, pero que esta línea no fue abordada.
"Nadie denunció"
No en vano, Cortabitarte ha resaltado que, antes del accidente, pasaron por allí más de 8.000 trenes y que "nadie denunció absolutamente nada de lo peculiar de esa línea". Sin embargo, sí consta una advertencia al respecto de José Ramón Iglesias Mazaira, un jefe de maquinistas de Renfe.
Al respecto, Cortabitarte ha recordado que se le había dicho a Iglesias Mazaira que "no había ningún problema". "Y yo estoy de acuerdo en lo que le dijeron", ha constatado, para seguidamente finalizar su declaración asegurando que la línea es segura "al 100 por 100". "Si no, estaría cerrada ahora mismo y antes".