Un joven se enfrenta a tres años de cárcel acusado de la muerte de agresor de su madre cuando trataba de defenderla
El joven de 22 años está acusado de homicidio imprudente y le piden220.000 euros de indemnización para la familia de la ex pareja y agresor de su madre, después de que este falleciese tras un forcejeo.
El Ministerio Fiscal solicita una pena de tres años de prisión para un joven de 22 años por un delito de lesiones en concurso medial con un homicidio por imprudencia grave. El joven está acusado de haber matado a la ex pareja de su madre, que estaba condenado por maltrato, cuando intentaba defenderla, según informa el diario 'Levante'.
Además, por esta agresión, que ocurrió el 25 de noviembre de 2019 en Torrent (Valencia), se solicita que el acusado pague una indemnización a los familiares del fallecido de 220.000 euros, en concepto de responsabilidad civil.
Intentaba evitar que su madre continuara siendo agredida
Sin embargo, la defensa del joven de 22 años, ejercida por la letrada Silvia Moya, solicitan su libre absolución, alegando que, tanto el fallecido como el acusado forcejearon mientras su cliente "intentaba evitar que su madre continuara siendo agredida". La víctima había acudido al domicilio de su ex pareja bajo los efectos del alcohol y otras sustancias y, bajo la presencia de su hija de 7 años, agarró a la mujer "fuertemente del cuello y la empujó causándole lesiones" y fue entonces cuando el hijo de esta intervino para defenderla.
El fallecido se negó a hacerse las pruebas radiológicas
Además, aseguran que las lesiones que presentaba la ex pareja de la madre se las había causado él mismo, cuando les decía que les iba a arruinar la vida. Y asimismo, recuerdan que, tras la detención del presunto maltratador y su posterior traslado al Hospital General de Valencia, se negó a realizarse una prueba radiológica recomendada por los médicos para descartar lesiones internas.
A continuación, los médicos le dieron el alta tras no detectar ni fractura en las costillas ni ninguna punción en los pulmones, ya que no se había dejado hacer las pruebas necesarias para detectarlo. Y finalmente, al día siguiente del forcejeo, tras celebrarse un juicio rápido y fue condenado por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número uno de Torrent, cuando cayó desplomado en la puerta de la casa de su hermano.
Tras intentar de realizare una reanimación cardiopulmonar, el hombre de 47 años acusado de maltrato, que padecía patologías previas, falleció por un shock hipovolémico. Según la autopsia realizada por los forenses, la muerte se produjo por una rotura del bazo que había sufrido durante el forcejeo con el hijo de su ex pareja.
Aunque en un principio el joven de 22 años había sido procesado por un delito de homicidio doloso (aquel en el que busca intencionadamente la muerte de la víctima), pero finalmente el Juzgado de Instrucción número tres de Torrent estimó que debía ser juzgado por un delito de homicidio imprudente. Según la jueza: "En las actuaciones no se han encontrado indicios de una voluntad decidida de quitarle la vida ni siquiera de forma probable, asumiendo así las eventuales consecuencias, sino de impedir que el mismo agrediera a su madre visto el estado de excitación que presentaba".