El jefe de Sutton declara que la víctima "bastante alterada" señaló a Alves: "Ha sido él"
El segundo día de juicio ha dejado la declaración del jefe de sala de Sutton que activó el protocolo de agresión sexual
Las amigas de la víctima de Alves declaran ante el juez: "Solo repetía, no me van a creer"
Caso Dani Alves: la denunciante se ratifica y las amigas aseguran que el exfutbolista tuvo una actitud "babosa"
El segundo día del juicio a Dani Alves por presunta agresión sexual en la discoteca Sutton el pasado 31 de diciembre de 2022, ha dejado la declaración del dueño de la sala que ha relatado que la declarado que vio a la chica "bastante mal, llorando mucho", y que decidieron activar el protocolo de agresiones sexuales y llamar al teléfono 112.
El jefe de sala de Sutton ha explicado durante su declaración en el juicio que la noche de la agresión sexual presuntamente por parte del futbolista Dani Alves notó que el jugador había "bebido o fumado algo". "A mí lo que me dijeron es que la chica decía que alguien la había tocado. En ese momento, cuando la vi, me di cuenta de que había sido algo más", ha añadido.
Según el responsable de Sutton, la joven estaba "bastante alterada" y repetía que se quería ir a casa y, ante su insistencia para saber lo ocurrido, finalmente les dijo que había sido víctima de una agresión sexual.
"Me dijo que no la iban a creer", ha recordado el testigo, que también ha precisado que la joven comentó que había entrado de forma voluntaria al baño donde se produjo la violación pero que una vez dentro quiso salir y "no pudo".
El testigo ha señalado que Alves era cliente habitual y que lo había visto más de una vez en la discoteca, aunque esa noche "no actuaba normal", refiriéndose a que había tomado algo de más. El primero en atender a la presunta víctima fue uno de los porteros de la discoteca. "Dijo que había sido víctima de una agresión sexual, cuando pasó Alves por delante después nos dijo que había sido él", y en ese momento insistió a sus amigas para que la acompañaran a una sala privada donde atenderla.
La joven "estaba bastante alterada, todo el rato decía que se quería ir a casa", y que le insistieron en que contara qué había ocurrido para activar el protocolo si era necesario. El director de la discoteca ha añadido que la joven no le contó detalles sobre la agresión: "Pregunté si había sido algo grave y me dijo que sí. Pregunté si había habido penetración y dio a entender que sí".
Un auxiliar de la discoteca ha explicado que, después de los hechos, estuvo con la víctima y sus amigas hasta que llegaron los Mossos d'Esquadra, y que la atendió porque tenía una herida en la rodilla. También ha relatado que la vio "llorando mucho, muy nerviosa", aunque no le dijo nada de lo que le había pasado.
También ha declarado este martes el entonces jefe de la amiga que iba de fiesta con la denunciante, que en ese momento hacía prácticas en un bufete de abogados. La amiga de la denunciante lo llamó para contarle lo ocurrido, y él ha explicado que la notó nerviosa, pero consciente de lo que había pasado y lo que implicaba: "Mi percepción era que se notaba que manejaba el entorno", ha valorado tras recordar que había hecho prácticas durante dos años en su bufete.