Creada en 2009 por Jan Koum como una especie de agenda inteligente, en la actualidad se ha convertido en una de las redes sociales más utilizadas a nivel mundial.
No solo permite intercambiar mensajes desde cualquier parte del mundo, sino que además se pueden compartir imágenes, videos, audios, documentos, etc.; siendo así una de las herramientas más versátiles.
La facilidad con la que nos permite estar conectados hace que nuestra agenda de contactos sea cada vez mayor y aumenten las conversaciones; muchas de ellas olvidadas. Y aunque a simple vista pueda parecer algo habitual, en realidad podría ser un factor de riesgo para la seguridad de nuestros mensajes.
Mantener contactos antiguos en el chat con los que hace tiempo que no intercambiamos ninguna información, más allá de ser un recuerdo, es un riesgo.
Si una persona con la que hemos hablado hace tiempo cambia de número, es posible que acabe en manos de otra persona. Esto es así porque generalmente los operadores suelen reutilizarlo cuando el anterior usuario se da de baja.
El problema llega cuando ese mismo número de teléfono acaba en manos de un nuevo individuo. Si todavía mantienes el anterior contacto asignado al número telefónico y decides contactar, estarás enviando mensajes a un completo extraño sin darte cuenta.
Por esta razón, para evitar estafas y encuentros desafortunados, los expertos recomiendan hacer una limpieza de contactos y conversaciones con regularidad.