TIEMPO

Cuándo hay más riesgo de lluvia: diferencias entre un anticiclón y una borrasca

Aunque anticiclón y borrasca se confundan con frecuencia, sus diferencias son notables. Consulta cuándo hay más riesgo de lluvia.

ondacero.es

Madrid | 24.10.2022 11:32

Cristal con lluvia en una imagen de archivo | Pixabay

Anticiclón y borrasca son dos fenómenos atmosféricos que tienen una base muy similar en su formación y que se confunden con frecuencia.

¿Qué es una borrasca y un anticiclón?

Son dos fenómenos meteorológicos diferentes que surgen por unas mismas acciones con respecto al aire y su interacción con la superficie terrestre. Estos dos fenómenos hacen referencia a las diferentes presiones de la atmósfera, que se mide en milibares (mbar).

La diferencia de más o menos milibares en una región crea las borrascas y los anticiclones. En un mapa, los anticiclones y las borrascas son fácilmente identificables teniendo en cuenta las isobaras.

Hablamos de un anticiclón cuando hay más presión atmosférica de lo normal. En cambio, cuando la presión es baja, se habla de una borrasca.

Un anticiclón se puede comparar con el tiempo estable, de cielo despejado y con sol y la presión atmosférica se encuentra a partir de 1016 milibares. El aire de un anticiclón es mas estable y se produce un fenómeno que es la subsidencia, que consiste en el descenso del aire desde la atmósfera.

La subsidencia impide la formación de precipitaciones.

Además, la masa de aire de un anticiclón suele traer cielos despejados y poco movimiento atmosférico. En invierno, el anticiclón suele provocar inversiones térmicas y nieblas.

Por otro lado, una borrasca se relaciona con un tiempo inestable, cielos nubosos, precipitaciones y en ocasiones, nevadas en invierno. El giro del aire en una borrasca es en sentido contrario al anticiclón, ya que en este caso el aire sube hacia arriba.

En el hemisferio norte la borrasca gira en el sentido contrario a las agujas del reloj.

En su núcleo, la borrasca se alimenta de aire frío y su tiempo de vida depende de la cantidad de aire frío que conduzca en su seno.