La llegada del fin de año también trae consigo el aumento de horas de luz. Los días y las noches dependen de la posición de la Tierra respecto al Sol y al movimiento de la Tierra sobre la estrella.
En las zonas más cercanas a los polos, por ejemplo, las noches y los días son más largos. De hecho, en los polos, las noches y días duran seis meses respectivamente. En cambio, cerca de la línea del ecuador sucede lo contrario y la variación de luz es menor a lo largo del año.
España es un país privilegiado en cuanto a la incidencia de luz incluso en los meses de invierno. Las horas de Sol son muchas porque está situada cerca del Trópico de Cáncer. Una gran ventaja para ahorrar gasto en iluminación.
El día de la Lotería, el 22 de diciembre, será el solsticio de invierno, el fenómeno astronómico donde el Sol estará en su posición más baja en el cielo y será la noche más larga del año. A partir de este momento, los días empezarán a alargarse poco a poco hasta el solsticio de verano, el 20 de junio.