Calor

Cómo mantener la casa fresca en verano

Mantener la casa fresca durante el verano puede ser un desafío. Te contamos algunas estrategias que puedes seguir para afrontar mejor el calor.

Alicia Bernal

Madrid |

Ventilador | NovaLife

Mantener la casa fresca durante el verano puede ser un desafío, especialmente en zonas geográficas con altas temperaturas, pero poner en práctica algunas estrategias para mantener y refrescar tu hogar durante estas fechas (sin depender excesivamente del aire acondicionado) puede ayudarte a ahorrar energía y reducir costes.

A continuación te resumimos algunas de las acciones que puedes tener en cuenta para afrontar mejor el calor. Especialmente en las olas de calor.

Consejos para afrontar el calor en el hogar

  • Uso de cortinas y persianas: cierra las cortinas o persianas durante el día, especialmente en las ventanas que reciben luz directa del sol. Además, el uso de cortinas o persianas térmicas pueden ayudarte a bloquear el calor.
  • Aislamiento: asegúrate de que la casa esté bien aislada, inspeccionando puertas y ventanas. Puedes añadir aislamiento adicional si es necesario en los techos y las paredes.
  • Ventilación adecuada: intenta ventilar la casa durante las horas más frescas del día, que suelen ser durante la noche y temprano en la mañana. Además, crear corrientes te ayudará a ventilar mejor.
  • Uso de ventiladores: aparte de los ventiladores portátiles, instalar ventiladores de techo es una buena medida.
  • Aparatos eléctricos y luces: intenta minimizar su uso, ya que estos aparatos generan calor.
  • Aire acondicionado: mantén el aire acondicionado en una temperatura adecuada, es decir, no lo ajustes a temperaturas extremadamente bajas.
  • Plantas y jardinería: algunas plantas de interior ayudan a mantener el aire fresco, como el aloe vera, el potos o la sansevieria, ya que absorben el calor. De la misma manera, los árboles y arbustos alrededor de la casa pueden proporcionar sombra y reducir la temperatura.
  • Techos y paredes: el color blanco refleja la luz solar y reduce el calor, o en su defecto los colores claros también pueden ayudar a reflejar el calor.
  • Uso de agua: añadir humedad al aire puede dar una sensación de frescor, por eso el uso de humidificadores y rociadores puede ser una buena opción.
  • Cambio de hábitos: si tienes la posibilidad, cocina al aire libre o en horarios más frescos. Es recomendable evitar el uso del horno durante el día.

Otras acciones que puedes tener en cuenta para mantenerte fresco es:

  • Usar ropa de colores claros y tejidos ligeros, como el algodón o el lino, ya que permiten que el aire circule y absorben el sudor.
  • Hidrátate adecuadamente te ayudará a mantener tu cuerpo fresco y evitar la deshidratación.
  • Usar sábanas de algodón ligeras y frescas.
  • Tomar duchas frescas ayudará a bajar tu temperatura corporal.