De ciudad de vacaciones a pueblo fantasma: así está ahora Marina d'Or
Varios vídeos que circulan por redes sociales muestran el estado de deterioro en el que se encuentra la que fuera la ciudad de vacaciones más popular.
"Marina d'Or ciudad de vacaciones, ¿dígame?", una frase que resonó durante muchos años en la televisión de los españoles y que era un indicador de que las vacaciones estaban cerca. Ubicada en Oropesa de Mar (Castellón) ofrecía todo para ser el destino perfecto de la época de los 2000: un complejo cerca del mar con un millón de metros cuadrados, cuatro hoteles, 15.000 apartamentos, restaurantes, salas de fiestas hasta parques temáticos y un balneario de agua marina.
Alcanzó su época dorada entre 2004 y 2008, gracias a una potente campaña de publicidad (con Anne Igartiburu como imagen) la empresa llegó a facturar más de 400 millones de euros anuales. Sin embargo, se convirtió en una víctima más del estallido de la burbuja inmobiliaria de 2008 y ese sueño de que se convirtiera en el Benidorm de Castellón comenzó a desvanecerse. Una situación que no hizo más que empeorar debido a la acumulación de huelgas y que en 2014 desembocó en la presentación del concurso voluntario de acreedores que sólo afectaba al negocio inmobiliario, el turístico continuó.
En 2019 el fondo de inversión estadounidense Farallon Capital Management cogió los mandos de los hoteles por un importe de 125 millones de euros. Aunque trataron de recuperar la rentabilidad con la pandemia, los ingresos volvieron a desplomarse. Fue entonces cuando el pasado agosto el Grupo Fuertes asumió el control de la ciudad de vacaciones por unos 70 millones de euros. Una gestión que asume la cadena de hoteles Benidorm Magic Costa Blanca.
Viral en Tik Tok
El paradisiaco resort tuvo que cerrar sus puertas el 17 de septiembre de 2023 y su apariencia es desoladora. En Tik Tok se han hecho virales varios vídeos donde se puede apreciar el deterioro y el estado de abandono en el que se encuentra Marina d'Or, llegando a asemejarse más a un pueblo fantasma. Una familia brasileña muestra en su cuenta 'Explorando Juntos' cómo se encuentra ahora la ciudad, aseguran que da la sensación de que la gente se escapó "dejando todo atrás". Cajas tiradas, estanterías vacías, negocios cerrados, calles desérticas, es lo único que queda de este destino que tan popular fue en su momento.
La ciudad de vacaciones busca ahora, después de haber vuelto a manos españolas, reinventarse y recuperar ese éxito que en su momento alcanzó. Un futuro que será "prometedor" según el Gobierno valenciano.
La inversión prevista para Magic World será de unos 40 millones de euros.