Parece una pesadilla, pero por desgracia es real. Un niño de 13 años ha fallecido como consecuencia de una meningoencefalitis amebiana primaria (MAP), que le sobrevino tras bañarse en un lago y contaminarse de naegleria fowleri, más conocida como ameba comecerebros.
El pasado 30 de julio, el pequeño David Pruitt se bañó en un lago del Estado de California, cuya ubicación no ha sido facilitada por las autoridades. Unos días después, comenzó a sentir un fuerte malestar acompañado de intensos dolores de cabeza.
David fue ingresado y pronto se le diagnosticó una meningoencefalitis que le estaba destrozando el cerebro, hasta que el 13 de agosto le sobrevino el fatal desenlace.
La tía del pequeño David ha iniciado una campaña pública para ayudar a sus padres a concienciar a toda la sociedad sobre los peligros de este parásito, según informa 20 Minutos.
La ameba comecerebros es un amebofagelado aeróbico, un parásito que vive en aguas dulces, templadas y estancadas, tales como lagos, piscinas, estanques, etc.
La forma de contaminarse con este parásito es vía aérea a través de la nariz cuando se nada o bucea en este tipo de lugares. Una vez instalado en mucosa, se reproduce a gran velocidad, provocando congestión nasal, fiebre, hemorragia y, finalmente necrosis.
A continuación, ataca al sistema nervioso central, provocando nauseas, vómitos y alteraciones sensoriales, que se van incrementando hasta provocar el coma y el fallecimiento en 72 horas
El pronóstico de la enfermedad en muy malo en la amplia mayoría de los casos, con una mortalidad cercana al 99%. En cualquier caso, la posibilidad de contaminarse con la naegleria fowleri es bastante remota.