Madrid |
No es una moda exótica ni un ejercicio complicado, al contrario. La caminata japonesa, tal y como ha explicado el doctor Aurelio Rojas, especialista en Cardiología en el Hospital Regional Universitario Carlos Haya, se trata de aplicar al simple acto de caminar las ventajas del ejercicio por intervalos, una estrategia cada vez más respaldada por la evidencia científica. El objetivo es claro: hacer el ejercicio más eficiente, especialmente cuando el tiempo escasea.
Según el especialista, este método consiste en alternar fases de caminata intensa con fases más suaves, lo que permite someter al cuerpo a estímulos más exigentes en menos tiempo. Se trata de "aplicar las bondades del ejercicio de intervalos al ejercicio cardiovascular", detalla Rojas.
La propuesta es sencilla y accesible para la mayoría de personas. Durante al menos 30 minutos, se deben alternar tres minutos caminando al máximo ritmo posible y tres de forma más lenta. Este ciclo se repite hasta completar la media hora.
Aunque eso sí, si se dispone de más tiempo, se puede prolongar la duración sin problema. "Esto va a hacer que nuestro corazón trabaje de una manera más intensa y más eficiente", explica Rojas, destacando que así se potencian los beneficios clásicos de salir a caminar.
Uno de los aspectos más destacados por el doctor Rojas es el impacto metabólico de este tipo de ejercicio. De hecho, la caminata japonesa ha demostrado ser especialmente eficaz para:
Este último punto resulta fundamental en épocas como las Navidades o en etapas de poco tiempo disponible. Tal y como detalla Rojas, este mayor gasto calórico ayuda a evitar la ganancia de peso e incluso a favorecer la pérdida de peso en personas que ya están siguiendo un proceso de adelgazamiento.