Sánchez acude a un G20 muy dividido en el que apoyará el impuesto global a los superricos que propone Lula
La cumbre de Río de Janeiro aspira a lanzar una alianza global contra el hambre y la pobreza No se esperan avances significativos en lucha contra el cambio climático, eliminación de combustibles fósiles o avance de renovables.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acude desde este lunes a la cumbre de un G20 en Río de Janeiro (Brasil) con posturas muy divididas sobre la situación geopolítica mundial y en el que el presidente anfitrión, Lula da Silva, impulsa un nuevo impuesto global para multimillonarios, una iniciativa que España apoya.
Según indican fuentes gubernamentales, los principales países del mundo afrontan esta cita con posturas muy divididas sobre las guerras de Ucrania y Oriente Próximo, entre los llamados países del sur global, y los que forman el G7 ampliado, entre los que se encuentra España.
En concreto, en el primer grupo se aprecia una gran influencia de los llamados BRICS, potencias como India, China, Rusia y Brasil que están actuando al unísono de forma muy contundente para hacer valer su visión y sus intereses frente a los países occidentales. Esta circunstancia dificulta los trabajos para avanzar en una declaración final del G20 ambiciosa y con contenido y, por tanto, es probable que se dejen fuera de la misma las referencias a la situación geopolítica mundial.
Iniciativa global contra el hambre y la pobreza
El principal asunto que impulsa la presidencia brasileña es una iniciativa global contra el hambre y la pobreza, que incluye establecer un nuevo impuesto para los superricos y que España apoya, según confirman fuentes gubernamentales, que señalan que el Gobierno de Pedro Sánchez ha aprobado iniciativas similares a nivel nacional y, por tanto, lo respaldarán por coherencia y convicción.
En ese sentido, indican que están empujando para movilizar fuentes de financiación innovadoras que permitan cubrir las necesidades que existen para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y los objetivos climáticos en los próximos años.
España apoyará esta iniciativa, pero todavía no está claro cómo va a quedar reflejada en la declaración final, algo que se negocia de forma intensa en los días previos al inicio de la cumbre porque no todos los países tienen la misma opinión sobre establecer este nuevo tributo.
Además del impuesto, esta iniciativa contra el hambre y la pobreza trata de poner el foco en la reducción de las desigualdades y se va a configurar posiblemente como un espacio dentro de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO) de intercambio de buenas prácticas y con contribuciones financieras que están aún por detallar.
Sánchez interviene en dos sesiones
Respecto a la participación del presidente Sánchez en la cumbre, está previsto que intervenga en las dos primeras sesiones, que se llevarán a cabo el lunes, una dedicada a la inclusión social y la lucha contra el hambre y la pobreza y la segunda sobre la reforma de las instituciones de gobernanza global. La última, que se celebra el martes, será sobre desarrollo sostenible y transiciones energéticas.
El Gobierno, además, se muestra satisfecho de haber logrado incorporar a la declaración final, la referencia a la cuarta Conferencia de Financiación Internacional al Desatollo que se celebrará en Sevilla en junio de 2025.
Consideran que es un hito importante porque será unas de las primeras ocasiones en que se manifieste, con acciones concretas, el deseo de reformar el sistema multilateral, en concreto la arquitectura financiera internacional, para que responda de manera eficaz a las necesidades para cumplir los ODS.
Trump y Milei
Por otro lado, las fuentes consultadas, hacen hincapié en el papel de Argentina y como, a su juicio, ha cambiado en este foro desde la llegada a la presidencia de Javier Milei. En este sentido, señalan que está siendo profundamente negativo por su falta de ambición y su empeño de bloqueo.
Por ejemplo, señalan que es muy contrario al tema impositivo y también se opone de forma radical a cualquier mención en los documentos de trabajo a la igualdad de género, los ODS o el cambio climático.
Finalmente, respecto a la influencia de la reciente victoria de Donald Trump en Estados Unidos, señalan que están en un proceso de transición y los representantes del país que están en el G20 pertenecen a la administración del actual mandatario Joe Biden, con quien España comparte posición en varios temas como la reforma del sistema financiero internacional, el tratamiento de la deuda, algunos puntos sobre el cambio climático o el impulso de las energías renovables.
El Gobierno es consciente, sin embargo, de que con la llegada de Trump alguna de estas posiciones puede cambiar, especialmente respecto al comercio, aunque todavía no quedará reflejado en la declaración final de este G20.