El juez federal John Coughenour ha bloqueado de forma cautelar la orden ejecutiva firmada el lunes por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para poner fin al derecho que concede la ciudadanía estadounidense por haber nacido en el país. El juez considera que es una medida "descaradamente inconstitucional".
Tras jurar su cargo como presidente, Trump aprovechó para revocar casi 80 órdenes ejecutivas como la retirada de Cuba de la lista de países terroristas, ha retrasado la prohibición de TikTok, ha indultado a los 1.500 asaltantes del capitolio o ha firmado la retirada de Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud.
Varios fiscales demócratas han solicitado el bloqueo de esta medida y Coughenour ha aceptado la petición, lo que convierte en esta decisión en la primera derrota de Trump.
Según la cadena estadounidense CNN, el magistrado ha bloqueado esta medida durante dos semanas mientras se realicen nuevas reuniones al respecto. El juez ha expresado que, durante sus más de 40 años de servicio, nunca se había enfrentado a una petición "tan clara" como esta.
"¿Dónde estaban los abogados cuando se tomó la decisión de firmar la orden ejecutiva?", se ha preguntado el juez federal sobre el equipo legal de Trump. La docena de jueces que han presentado una demanda contra esta orden consideraban que la retirada de la ciudadanía por derecho de nacimiento es una violación de la Constitución en su 14ª Enmienda que reserva la ciudadanía "a toda persona nacida o naturalizada en Estados Unidos".
Cualquier apelación debe presentarse ante el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos donde todos los jueces son demócratas. Si en caso se enquistara, Trump podría recurrir al Tribunal Supremo, donde los republicanos tienen mayoría.
Sin embargo, el Tribunal Supremo ha ratificado en varias ocasiones este derecho y el Congreso aprobó una ley federal antes de la ratificación de la 14ª enmienda de 1868 que otorga este derecho a los nacidos en el país americano.