El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, que acudió esta mañana al lugar de los hechos junto a la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, explicó ante los medios que también había cuatro heridos "de una gravedad relativa".
Cazeneuve, que habló de "una intervención difícil" de los más de un centenar de bomberos que acudieron a la calle Myrha, en el distrito XVIII, indicó que "es demasiado pronto para determinar las causas de este drama".
Pero minutos después su portavoz, Pierre-Henry Brandet, señaló que se contempla una pista criminal, sobre todo porque los bomberos habían extinguido esta misma noche un fuego en el hueco de la escalera del edificio, dos horas antes de que se declarara uno nuevo.
Brandet precisó que se efectuó una primera llamada a las 2.23 locales (00.23 GMT) y que la intervención de los bomberos terminó rápidamente al apagarse un fuego hecho con papel en la planta baja.
Algo más de dos horas más tarde, los bomberos tuvieron que acudir a la misma dirección porque recibieron un aviso de un incendio de nuevo en el hueco de la escalera, que se había propagado desde la planta baja a los pisos superiores.
Entre los muertos, algunos fallecieron a causa del humo y otros porque se lanzaron por las ventanas para escapar de las llamas. La investigación se ha encargado a la brigada criminal de la Policía Judicial. Hidalgo explicó que el edificio del siniestro no se consideraba insalubre y que tampoco es una casa de viviendas sociales.