El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha mostrado su satisfacción por el resultado, provisional, de las elecciones de mitad de mandato. Todavía se están recontando los votos, pero ya se confirma que el Partido Republicano no ha logrado el resultado que esperaba.
Finalmente no se producirá la llamada "gran ola republicana", la victoria masiva que anticipaban las encuestas y que los representantes del partido en Washington junto con Donald Trump y sus seguidores daban por segura.
Por el momento, el Partido Demócrata tiene 48 senadores frente a los 49 de los republicanos y en la Cámara de Representantes, los demócratas han perdido la mayoría con 189 diputados frente a los 207 del Partido Republicano.
Todavía queda mucho por decidir. Para que los conservadores se lleven finalmente el Senado tendrían que vencer en Nevada, Arizona y Georgia, donde habrá un desempate el próximo 6 de diciembre.
A pesar de tener la Cámara de Representantes en contra, Joe Biden presume de ganarle a las encuestas y asegura que en estas elecciones que ha ganado la democracia.
"Basado en lo que sabemos hasta hoy, hemos perdido muy pocos escaños. Aún tenemos posibilidades de mantener la mayoría del Congreso, pero va a estar muy ajustado", ha dicho el presidente estadounidense en una rueda de prensa.
Que el Partido Demócrata haya superado cualquier expectativa es algo que a cualquiera le haga hace exclamar: 'uf, qué alivio'
Biden insiste en no ver la derrota de su partido: "el hecho de que hayamos ganado, el hecho de que el Partido Demócrata haya superado cualquier expectativa es algo que a cualquiera le haga hace exclamar: 'uf, qué alivio'".
Asimismo, ha anunciado que se presentará a la reelección en 2024. De momento, Biden niega que vaya a reorientar el rumbo de su gobierno porque lo que necesita, dice, es tiempo para que sus medidas sean reconocidas,
A Donald Trump, al que muchos de su partido acusan de ser responsable de los malos resultados de los republicanos, algunos consejeros le han pedido que no anuncie todavía su candidatura a la presidencia para el año 2024 hasta que no se celebren las nuevas elecciones en Georgia.
Sin embargo, el propio Trump considera los resultados "bastantes decepcionantes" para el partido republicano. Para él personalmente, dice, que han sido "una gran victoria" porque considera que a los candidatos a los que apoya les ha ido muy bien
Trump ya se encuentra en campaña interna ante la contundente victoria del gobernador de Florida, Ron DeSantis, que va a ser uno de sus rivales en las primarias de su partido.