Así lo confirmó a la emisora italiana Radio 24 Mariella Enoc, presidenta del hospital pediátrico que gestiona el Vaticano, Bambino Gesù, en Roma, y que se encargaría de ingresar al pequeño.
Enoc explicó que la ministra de Defensa italiana, Roberta Pinotti, ha puesto a disposición un avión y que el equipo médico del hospital Bambino Gesù está preparado para despegar en cuanto se les avise.
Agregó que ha podido hablar con el padre del bebé de 23 meses, Thomas Evans, quien le confirmó que se le ha vuelto a colocar la mascará de oxígeno después de que anoche se le desenchufase de la respiración asistida como ordenaron los jueces.
Enoc viajó ayer a Liverpool para poder entrevistarse con los médicos del hospital donde se encuentra el bebé, pero no fue recibida, como ella misma relató.
La directora del hospital explicó que el papa Francisco, quien el pasado miércoles recibió en el Vaticano al padre del niño, le dijo que hiciese todo lo posible por el bebé.
Alfie Evas se encuentra en el hospital Alder Hey Children's de Liverpool (Inglaterra) desde diciembre de 2016 en estado semivegetativo y sus padres están librado una batalla judicial para conseguir permiso para trasladar a su hijo a Roma para continuar con su tratamiento.
Pero su demanda ha sido rechazada por las distintas instancias judiciales del Reino Unido a las que han apelado, así como por la Corte Europea de Derechos Humanos de Estrasburgo.
Alfie fue desconectado anoche de las máquinas y, aunque los profesionales habían advertido de que no sobreviviría más de unos minutos sin esa asistencia, el pequeño lleva nueve horas respirando, algo que, según adelantó su padre, ha dejado a los médicos "boquiabiertos".
El Gobierno de Italia otorgó ayer la nacionalidad al bebé en un intento de que al "ser ciudadano italiano permita al niño el traslado inmediato a Italia", según recoge un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.