A sus 76 años, Donald Trump ha anunciado su voluntad para ser de nuevo el candidato republicano en las elecciones presidenciales de 2024, en un momento en que se enfrenta a diversos problemas con la justicia y cuyo liderazgo ha sido cuestionado tras el flojo resultado en las elecciones de 'midterm' donde no se produjo la esperada "gran ola republicana", la victoria masiva de los conservadores que anticipaban las encuestas.
Con este anuncio Trump ha abierto la carrera por la nominación del Partido Republicano, en la que por el momento se valoran otros dos posibles candidatos: Ron DeSantis, gobernador de Florida, y Mike Pence, antiguos aliados suyos.
Se trata de la tercera vez que Donald Trump competirá por ser candidato a la Casa Blanca, algo que dividirá a los republicanos y unirá a los demócratas en su contra.
En su discurso de más de una hora ha mezclado pocas verdades con muchas mentiras,exageraciones propias de su inmenso ego y le ha faltado energía, la que siempre ha sido su mejor cualidad.
Asimismo, Trump se ha presentado como el candidato que puede salvar a Estados Unidos de una debacle y devolverle la "gloria" perdida tras su presidencia.
Hacer América mejor y gloriosa de nuevo
"Para hacer América mejor y gloriosa de nuevo, esta noche anuncio mi candidatura a la presidencia de Estados Unidos", ha subrayado Trump, quien insistía en acusar a Joe Biden de "destruir la economía" de EEUU.
Entre los temas tratados se encuentran desde la economía hasta la educación, pasando por la delincuencia, la migración, el aborto, la política exterior, la guerra de Ucrania, etc.
No ha faltado su desprecio hacia los inmigrantes "que quieren entrar en la nación" y ha resaltado que las ciudades norteamericanas se han convertido en "pozos sépticos de droga y crimen".
Como es constumbre, Trump también ha cargado contra la prensa y la izquierda, y ha dicho ser "una víctima" perseguida por una confabulación de toda clase de fuerzas y peor tratado que el gánster Al Capone.