El "Campamento por la paz", instalado hace más de un mes en la plaza, ha servido de punto de encuentro para aquellos que al conocer el nuevo pacto han decidido desplazarse hasta el centro de Bogotá esta tarde para festejar el acuerdo con tangos y milongas. La convocatoria, difundida a través de las redes sociales ante la inesperada noticia, tuvo una menguada respuesta al ser este un sábado que marca el inicio de un puente festivo en el que muchos bogotanos aprovecharon para salir de la ciudad.
Entre quienes se congregaron ante la escalinata de la Catedral Primada de Colombia había algunas mujeres con atuendos propios de las zonas rurales del país que, emocionadas y aplaudiendo, escucharon las palabras los jefes negociadores del Gobierno, Humberto de la Calle, y la guerrilla, "Iván Márquez", alias de Luciano Marín Arango.
Carolina Velandia, una de las asistentes, afirmó que bailaba para agradecer la "resistencia" de los ciudadanos que durante las últimas semanas han acampado para exigir un acuerdo de paz definitivo. "Queremos una Colombia reconciliada, incluyente y que se pueda abrazar. Necesitamos más ideas y menos balas", señaló Velandia. Juan David, uno de los ciudadanos acampados en la plaza desde octubre, reconoció estar "feliz y satisfecho" por el nuevo acuerdo: "Se ha cumplido el objetivo de una ciudadanía movilizada", añadió.