María Gámez Gámez, hasta ayer, directora general de la Guardia Civil, dimitió del cargo tras la imputación de su marido por una trama de corrupción. Le dará el relevo al frente del instituto armado María de las Mercedes González, delegada del Gobierno en Madrid.
El marido de Gámez, Juan Carlos González, ha sido señalado por supuestos cobros a través de la empresa de su hermano, Experience Management Group SL, sita en la Calle Alcalá 607 (Madrid) y dedicada a la contabilidad, auditoría y asesoría fiscal.
La renuncia del cargo llega en un momento convulso para la Benemérita. El caso Mediador, que provocó el cese del máximo responsable de la Guardia Civil en Santa Cruz de Tenerife, José María Tienda Serrano; y el caso Cuarteles, donde se encontraron irregularidades en los mandos del instituto armado no han propiciado el cese de Gámez, sino la vinculación de su marido por el caso de los ERE de Andalucía.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, tildó la renuncia de "ejemplo de honestidad, de lealtad a unos principios y de decencia democrática".
María Gámez ha sido la primera mujer en dirigir la Guardia Civil. Oriunda de Sanlúcar de Barrameda, provincia de Cádiz, estudió Derecho en la Universidad de Málaga y es diplomada en Alta Dirección de Empresas por el Instituto Internacional San Telmo.
A su cargo tenía:
Entre sus funciones destacaban el impulso y coordinación del servicio y distribución de las Unidades de la Guardia Civil, llevar a cabo los cometidos que las disposiciones reguladoras del Ministerio de Defensa; ejecutar la política de recursos materiales y económicos asignados a la Guardia Civil.
Además, tenía las competencias cumplir las funciones que le atribuye la legislación en materia de armas y explosivos y proponer la adquisición de los equipos de transmisión, equipos de tratamiento de la información, armamento, en colaboración con el Ministerio de Defensa, medios de automoción, helicópteros o naves, entre otras funciones.