El Gobierno ha concedido el indulto parcial a la expresidenta de la asociación Infancia Libre, María Sevilla Sánchez, condenada a dos años y cuatro meses de prisión por sustracción de menores y la pérdida de la patria potestad de su hijo durante cuatro años.
Con este indulto, se le reduce la pena a dos años de prisión, por lo que no entraría en la cárcel, y se conmuta la pérdida de la patria potestad por 180 días de trabajos en beneficio de la comunidad.
Tras conocerse esta medida aprobada en el Consejo de Ministros, la ministra de Igualda, Irene Montero, celebró públicamente el perdón a María Sevilla y explicó los motivos por los cual, según ella, hay que proteger a mujeres como Sevilla que han sido injustamente condenadas por proteger a sus hijos frente a padres maltratadores.
Se defienden a sí mismas y a sus hijos frente a la violencia machista de los maltratadores
Para Montero, Sevilla encaja en la figura de "madre protectora", aquellas que sufren la "criminalización y la sospecha por parte de la sociedad cuando lo que están haciendo es defenderse a sí mismas y a sus hijos frente a la violencia machista de los maltratadores".
Por ese motivo, la ministra de Igualdad defiende que el papel del Estado es "saldar la deuda" que tiene con las madres protectoras.
Así, defiende la necesidad de políticas públicas que "garanticen que los maltratadores no pueden asesinar a sus hijos e hijas ni vulnerar los derechos de esas mujeres".