El Gobierno tacha de "falsa" la denuncia contra Begoña Gómez interpuesta por Manos Limpias

La denuncia interpuesta por el sindicato Manos Limpias ha generado un terremoto político durante la Sesión de Control al Gobierno, después de conocer que esta asociación acusa a Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, de un supuesto delito de tráfico de incidencias.

A raíz de esta denuncia, aceptada por un juez de Madrid, el Partido Popular ha pedido explicaciones a Pedro Sánchez, y le ha instado a "dar la cara" en torno a este asuntos. Sin embargo, el Gobierno ha cerrado filas en torno al jefe del Ejecutivo, y ha tachado de "falsa" esta denuncia interpuesta por Manos Limpias.

Sánchez confía en la justicia

El propio Pedro Sánchez ha sido el primero en pronunciarse al respecto, respondiendo a una pregunta del portavoz de ERC, Gabriel Rufián. El político independentista, refiriéndose a la Operación Cataluña o al caso de espionaje Pegasus, ha preguntado al presidente si todavía posee confianza en la justicia española:

"En un día como hoy y después de las noticias que he conocido, a pesar de todo sigo creyendo en la Justicia de mi país", ha aseverado el presidente, que ha hecho hincapié en su confianza en la autonomía, la independencia y la separación de los poderes del Estado.

Han sido otros miembros del Ejecutivo los que han cargado con una mayor severidad contra estas acusaciones dirigidas hacia la esposa de Sánchez: la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, ha afirmado que el Ejecutivo no permitirá que actitudes "trumpistas", como esta denuncia "falsa", deterioren la democracia en nuestro país.

El Gobierno considera "falsa" la denuncia

La vicepresidenta ha tachado a Manos Limpias de ser una "organización ultraderechista" de la que el PP se está aprovechando para difamar a Pedro Sánchez: "Estamos ante el peor PP de la historia y evidentemente el señor Feijóo se confunde con las prácticas y los discursos de la derecha y la ultraderecha", ha declarado María Jesús Montero.

Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, ha respaldado también que se trata de "una denuncia falsa más", y José Manuel Albares, de titular de Exteriores, afirma que se ha traspasado "una línea absolutamente roja" tratando de perjudicar a alguien "intachable".

Albares ha denunciado una "campaña de acoso" contra Begoña Gómez y ha querido expresar una "absoluta indignación" con el hecho de que se incluyan a familiares de representantes públicos dentro del juego político.

Patxi López, portavoz del grupo socialista, se ha mostrado "un poco harto de esa estrategia por la que uno en un país debe demostrar la inocencia".

Tal y como señala EFE, fuentes socialistas indican que Pedro Sánchez estaría dolido y afectado personalmente por este señalamiento a su mujer, si bien el partido considera que la denuncia no tendrá mayor trascendencia.

El PP sigue pidiendo explicaciones

El PP, a pesar de la defensa realizada por el Gobierno, reclama explicaciones a Pedro Sánchez: Ester Muñoz, vicesecretaria de la formación, considera que es "urgente, imperativo y necesario" que Sánchez ofrezca explicaciones sobre un caso que juzga como "muy preocupante".

El PP, sin embargo, no ha aseverado que Gómez haya incurrido en un delito de tráfico de influencias, y ha emplazado al juez a determinar si el delito se ha dado o no.

El PP no ha anunciado por ahora acciones contra el jefe del Ejecutivo ni contra su mujer, aunque mantiene abierta la puerta a citarles en la comisión de investigación del Senado sobre el caso Koldo.

Pepa Millán, portavoz de Vox, ha declarado que el juzgado de Madrid ha abierto diligencias al haber visto indicios, y ha asegurado que el PSOE "está inmerso en un gravísimo caso de corrupción".

La denuncia que ha provocado la polémica

Tal y como ha publicado esta mañana 'El Confidencial', el Tribunal Superior de Justicia ha declarado estas diligencias secretas, y han recaído en el instructor Juan Carlos Peinado.

La denuncia de Manos Limpias se construye en torno a una serie de noticias de prensa, que señalan que la esposa del presidente del Gobierno podría haber aprovechado su posición para recomendar o avalar a diversas empresas que se presentaron a licitaciones públicas.