La Fiscalía ha solicitado al instructor del 'procés', Pablo Llarena, que reactive las euroórdenes contra el ex presidente catalán Carles Puigdemont y su ex consejero Toni Comín para que sean entregados a España desde Bélgica, donde se encuentran, para poder continuar el procedimiento penal en su contra por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.
Los fiscales del 'procés' han dado este paso después de que el Tribunal General de la UE (TGUE) levantara el 5 de julio la inmunidad de la que gozaban cautelarmente ambos eurodiputados, dando vía libre así para que el juez Llarena reinicie las euroórdenes que había solicitado para que los líderes independentistas respondiesen ante la justicia en España por su participación en el 1 de octubre.
Además de las euroórdenes, Fiscalía ha solicitado que se emita orden de busca y captura internacional contra ambos por si fuera necesario tramitar solicitud de extradición, según un escrito al que ha tenido acceso Europa Press.
La Fiscalía solicita al juez instructor de la causa del "procés" que actúe contra Puigdemont y Comín por delito de malversación, que acarrearía pena de prisión de entre seis y doce años debido a la elevada cuantía de los fondos que presuntamente habrían desviado.
Puigdemont reaccionó con un extenso comentario en su cuenta de Twitter anunciando un recurso ante el TJUE. "Nada se acaba, todo lo contrario. Todo sigue. Presentaremos recurso en el TJUE, y defenderemos hasta el final nuestros derechos fundamentales, que son también los derechos fundamentales de los catalanes y los europeos. Con el mismo espíritu del primer día, trabajando por ganar la libertad", aseguró.
Esta petición de la Fiscalía llega en el día en el que la exconsellera y eurodiputada de Junts Clara Ponsatí ha sido detenida en Barcelona después de desafiar a Llarena paseando por la capital condal a pesar de la orden de detención que hay en su contra.
La Fiscalía ha reclamado esta instrucción al juez del procès un día después de las elecciones generales en las que aunque ha ganado el Partido Popular, es el Partido Socialista de Pedro Sánchez el único que tiene opciones de investidura si pacta con los nacionalistas. Una negociación en la que los siete escaños logrados por Junts per Catalunya son decisivos para convertir a Sánchez en presidente. Por esta razón Puigdemont tiene la llave desde su retiro en Waterloo.