Esta mañana ha ocurrido un embrollo en el Congreso. Durante toda la mañana el Gobierno ha temido perder la votación del real decreto que les permite manejar desde Moncloa cómo se repartirán los fondos que nos llegan de Europa. Ciudadanos siempre ha estado en contra porque considera que así se ignora a las autonomías y el PP se sumaba a la negación. Esquerra, en plena campaña por las elecciones catalanes y pese a que han actuado hasta ahora como socios de Sánchez, han negado el apoyo.
Así, uno tras otro, los partidos han ido negando su apoyo a la medida del Gobierno, que pensaba que perdería la votación cuando, para sorpresa de todos, los 52 diputados de VOX se han abstenido.
Calvo no ha querido reconocer que la extrema derecha, tal y como ella define a VOx, han sido su apoyo. El portavoz de Esquerra, Gabriel Rufián lo ha señalado: "Es curioso ver a VOX votando con el Gobierno filoterrorista y socialcomunista". Iván Espinosa de los Monteros ha negado ninguna negociación con el Gobierno y ha asegurado que se "trata de un mal necesario para que los fondos lleguen cuanto antes".
La vicepresidenta ha agradecido, con la boca pequeña, el apoyo del grupo político que lidera Santiago Abascal: se trata "de buena educación agradecer a quienes hoy facilitan las cosas a su país, no al Gobierno".