Madrid | (Publicado 26.11.2024 14:19 )
Una lectura detallada de varios mails destapa un posible efecto boomerang del nuevo material aportado en su defensa por Begoña Gómez en la causa en la que el juez Juan Carlos Peinado investiga sus actividades empresariales.
Se trata de una batería de nuevas diligencias solicitada por Begoña Gómez para defenderse de los nuevos delitos de apropiación indebida e intrusismo, denunciados en la última querella de la asociación Hazte Oír.
“Estimada Cristina: Tal y como hemos acordado hace un momento, te adjuntamos un modelo de “contrato de cesión de derechos” a la UCM que sí tienen dicha vinculación”, le comunica la Sección de Contratos y patentes de la UCM en un correo fechado el 6 de octubre de 2022 y que forma parte de una cadena de mails dirigidos a su cuenta de correo personal con el dominio de Gmail además de a otros destinatarios.
También figura entre los destinatarios de otros dos correos electrónicos relacionados con diversas gestiones relacionadas con el máster y la cátedra de Transformación Social Competitiva, codirigida por Begoña Gómez, entre ellas, la elaboración del pliego de contratación del software bajo sospecha.
Hasta ahora, el sumario había arrojado la intervención personal de la asesora de Moncloa María Cristina Álvarez en la organización de un simposio y en la recaudación de financiadores para la cátedra de la UCM.
Entre el nuevo material, destaca un correo remitido el 24 de abril de 2023 con el asunto “Documentación licitación” por la Gerencia de la escuela de Gobierno de la UCM y cuyos destinatarios son la cuenta profesional de Begoña Gómez y la cuenta del correo personal de María Cristina Álvarez.
Se trata de una comunicación en la que, como defiende el abogado de Begoña Gómez, Antonio Camacho, fue la Complutense la que fijó las condiciones sobre el pliego técnico para la contratación de las empresas que financiarían el software: “El pliego de prescripciones técnicas ha de firmarlo Begoña. He modificado el término ´recomendación` para que sea una exigencia y el perfil se adapte exactamente a lo que solicitaría como cumplimiento obligatorio”.
En otro mail remitido por Gerencia el 11 de mayo de ese mismo año a diversos destinatarios, incluidas Begoña Gómez y la asesora Cristina Álvarez, las indicaciones van en la misma dirección: “Buenos días. Adjunto la propuesta del pliego de cláusulas administrativas particulares. Tiene que ir firmada por un responsable de la Cátedra”.
Respecto al supuesto delito de apropiación indebida, el abogado Camacho pretende demostrar que Begoña Gómez no registró la propiedad intelectual del software sino el dominio, y también siguiendo indicaciones de la UCM. En ese sentido, en el mail encabezado con “Estimada Cristina” en el que el departamento de Sección de Contratos y patentes le envía un modelo de contrato de cesión de derechos a la UCM, hace hincapié en una de las cláusulas:
“La UCM se obliga a que figure el nombre de los autores en todos los ejemplares de la obra e incluir la mención INTERNAICONAL de reserva de propiedad intelectual y observar las formalidades administrativas requeridas para la circulación y explotación de la obra, y los autores reconocen el derecho de la UCM a que figure su nombre en dichos ejemplares. Los autores cedentes facultan expresamente a la UCM para identificarles como autores y facilitar sus datos personales ante el Registro Territorial de la Propiedad Intelectual, en caso de que se realice la inscripción de la obra”.
En el escrito dirigido este lunes al juez Peinado aportando estos nuevos correos electrónicos, el abogado solicita la citación de varios testigos, entre otros la interventora que en la Asamblea de Madrid declaró que la firma de los pliegos “se realizó de acuerdo con las normas de la UCM”.
Además, rebate la apropiación indebida de marcas puesto que fue Begoña Gómez la que propuso el nombre de “Transformación Social Competitiva” como título del máster.