El Congreso de los Diputados ha aprobado este martes dos proposiciones no de ley que permitirán reducir el IVA de los servicios de peluquería, barbería y estética al 10%, actualmente gravados al 21%. Este alivio fiscal ha sido iniciativa de ERC y el Partido Popular y ha contado con el apoyo de todos los grupos, a excepción de PSOE, que ha votado en contra, y de Unidas Podemos, que se ha abstenido.
Según ha explicado la alianza empresarial por la peluquería y la estética, la puesta en marcha de estas proposiciones es un paso adelante para un colectivo que llevaba días protestando por los “reiterados incumplimientos” del Gobierno, tras haberles dejado fuera del plan de ayudas directas y no haber cumplido su promesa electoral de bajar el IVA en su actividad.
En su exposición, la portavoz fiscal del PP, Carolina España, ha asegurado que las empresas de este sector "están al límite de su aguante económico" y que esta rebaja fiscal permitiría salvar el 50% de las empresas que se encuentran ahora mismo en riesgo. También ha reconocido que fue durante el mandato de Mariano Rajoy cuando subió al 21% el IVA a varios sectores, aunque ha alegado que se hizo "con la idea de que se volviera a la situación general" una vez se superara esta crisis, algo que ya hicieron con sectores como las floristerías o la cultura.
Joan Margall, diputado de Esquerra Republicana, ha señalado que el sector de la peluquería ha perdido durante el último año el 30% de empresas que existían y que esto ha llevado a más de 30.000 trabajadores al paro y otros 8.000 se encuentran en ERTE. Ha calificado a esta como una situación de "extrema fragilidad", algo que hay que auxiliar con una rebaja fiscal así como un "plan de rescate sectorial".
Por su parte, el PSOE se ha posicionado en contra de estas proposiciones y ha argumentado su negativa en que reducir las necesidades del sector a una única rebaja fiscal "no es en estos momentos la solución". Patricia Blanquer, portavoz de Hacienda del Grupo Socialista ha negado que esta sea una medida eficaz ni de incentivo de demanda y ha tachado esta iniciativa del PP de "broma de mal gusto", acusándoles de elevar el IVA del 8% al 21% tras la crisis.