El año 2025 va a empezar con una serie de ajustes fiscales, que no sólo afectarán a grandes empresas, sino también a hogares de toda España, ya que se pone fin a una serie de deducciones que se empezaron a aplicar hace años como forma de combatir la inflación.
Estos son los principales cambios en materia fiscal que nos traerá el nuevo año:
En 2022 y a raíz del estallido de la guerra en Ucrania, el Gobierno aprobó un IVA del 0% para los productos de primera necesidad: pan, leche, aceite de oliva, verduras, frutas y legumbres. El 1 de octubre de 2024, este 0% pasó a ser del 2% y ahora, a partir del 1 de enero de 2025, volverá al tipo reducido del 4%. En el caso de las pastas o los aceites de girasol o soja, pasará del 7,5% al 10% en 2025.
En 2021, el IVA en la electricidad bajó al 10% y al 5% en 2022, también como forma de hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania. Esto se aplicaba en contratos de menos de 10 kilovatios cuando el mercado superara los 45/MWh. Pero en 2025, este IVA regresará al valor del 21%.
Hasta ahora, el Gobierno aplicaba una reducción en el IRPF para aquellas personas que realizaran una reforma que tuviese como objetivo volver más eficiente su vivienda reduciendo así el consumo energético.
Pero en 2025, estas deducciones fiscales desaparecerán por completo.
Esta subida entrará en vigor a partir de abril del año que viene cuando todos los ayuntamientos del país tengan que aplicar una tasa de basuras obligatoria que afecta a la recogida, gestión y reciclaje. Podría llegar hasta los 200 euros al año por hogar.
También entrará en vigor a partir del mes de abril y afecta a los cigarrillos electrónicos y a los vapers, que comenzarán a tributar dentro de los Impuestos Especiales, tal y como hace el tabaco normal.
Esta subida recaerá sobre los puntos de venta y fabricantes y el impuesto irá entre los 0,15€ y 0,20€ por mililitro de nicotina.
El IRPF subirá del 28% al 30% para aquellas rentas que superen los 300.000 euros de beneficios al año. Asimismo, mientras las pymes reducirán su tipo impositivo del 25% al 20%, el de las grandes empresas con beneficios en el extranjero aumentará.