El IPC sube al 6,1% en enero, una décima más de lo esperado
La electricidad se encarece un 46,4% en el último año, incluyendo las rebajas de impuestos, y los combustibles líquidos se disparan un 44%.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó un 0,4% en enero en relación al mes anterior y recortó su tasa interanual hasta el 6,1%, cuatro décimas por debajo de la tasa de diciembre (6,5%), debido al abaratamiento de la luz, de los alimentos y de los paquetes turísticos, según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que implanta hoy la nueva base 2021 en este indicador.
La tasa interanual del IPC registrada en enero (6,1%) es una décima superior a la avanzada a finales del mes pasado por el INE (6%). En el caso de la tasa mensual (-0,4%), el dato definitivo es una décima menor al que adelantó Estadística (-0,5%).
Con el dato de enero, el IPC interanual encadena su decimocuarta tasa positiva consecutiva y suma dos meses seguidos en tasas superiores al 6%, niveles que no se veían desde hace casi tres décadas.
Según Estadística, en el comportamiento interanual del IPC destaca la bajada de los precios de la electricidad, frente al incremento registrado en igual mes de 2021; de los paquetes turísticos, y de los alimentos, ya que los precios de las legumbres y hortalizas y del agua mineral y los refrescos y zumos han subido menos en enero de este año de lo que lo hicieron un año antes.
En concreto, el grupo de vivienda recortó más de cinco puntos su tasa interanual en enero, hasta el 18,1%, por el descenso del precio de la electricidad, en contraste con la subida de los precios del gas.
La luz se ha encarecido en el último año un 46,4% incluyendo las rebajas impositivas aplicadas a la factura de la electricidad (en diciembre de 2021 esta subida era del 72%). Descontando dichas rebajas fiscales, la subida interanual del precio de la luz sería del 67,5%.
Sin tener en cuenta la rebaja del impuesto especial sobre la electricidad y las variaciones sobre otros impuestos, el IPC interanual alcanzó en enero el 7%, nueve décimas más que la tasa general del 6,1%. Así lo refleja el IPC a impuestos constantes que el INE también publica en el marco de esta estadística.
Junto a la electricidad, también contribuyó al descenso del IPC interanual el grupo de alimentos, que rebajó dos décimas su tasa, hasta el 4,8%, y el grupo de ocio y cultura, que registró una tasa interanual del 1,2%, cinco décimas inferior a la de diciembre, por el abaratamiento de los paquetes turísticos.
Por contra, el grupo de transportes elevó cuatro décimas su tasa interanual, hasta el 11,3%, por el mayor coste de las gasolinas para el transporte personal, mientras que la tasa del vestido y el calzado subió casi tres puntos, hasta el 3,7%, debido a que los precios de todos sus componentes bajaron menos que en enero de 2021.
La subyacente, en máximos desde octubre de 2012
La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó en enero tres décimas, hasta el 2,4%, con lo que se sitúa más de 3,5 puntos por debajo de la tasa del IPC general. Es la tasa más elevada de la subyacente desde octubre de 2012.
En el primer mes de 2022, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 6,2%, cuatro décimas por debajo del mes anterior. En términos mensuales, el IPCA retrocedió un 0,8% en el mes de enero.
Las rebajas de invierno impulsan el descenso del IPC mensual
En tasa mensual, el IPC rompió con una racha de cinco meses de ascensos al registrar en enero una disminución del 0,4% respecto a diciembre de 2021.
A este descenso de los precios en el mes contribuyó, sobre todo, el abaratamiento del vestido y el calzado en un 13% por las rebajas de invierno; del ocio y la cultura en un 0,9% por el menor coste de los paquetes turísticos, y de la vivienda en un 0,1% por la bajada de los precios de la electricidad, frente al repunte que experimentaron dentro de este grupo los precios del gas y del gasóleo para calefacción.
En el lado contrario, el transporte elevó un 1,9% sus precios en el mes por el encarecimiento de los carburantes para vehículos personales y de los automóviles, mientras que los alimentos incrementaron un 0,7% su tasa mensual por el mayor coste del pescado y el marisco, el pan y los cereales, y la leche, el queso y los huevos.
También elevaron sus precios en enero los grupos de menaje (+0,5%) y de otros bienes y servicios (+0,4%), en este último caso debido al encarecimiento de los seguros, habitual en esta época, según el INE.
Lo que más bajó de precio en el mes de enero respecto al mes anterior fueron los otros artículos de vestir (-19%) y los paquetes turísticos nacionales (-17%), mientras que lo que mas se encareció fueron los aceites (+7%), el gas (+6%) y el arroz (+5,5%).
El butano se dispara un 33% en un año y el aceite de oliva, un 30%
En el último año (enero de 2022 sobre enero de 2021), lo que más ha subido de precio ha sido la electricidad (+46,4%); los combustibles líquidos (+44,6%); butano y propano (+33,5%), y el aceite de oliva (+30,1%).
Por el contrario, lo que más se ha abaratado desde enero de 2021 son los peajes y aparcamientos (-21%); los vuelos internacionales (-9,1%); los equipos de telefonía móvil (-5,2%); el transporte marítimo de pasajeros (-3,5%), y los ordenadores personales (-1,9%).
Castilla - La Mancha, la comunidad con la tasa más alta
La tasa anual del IPC bajó en enero en todas las comunidades autónomas, salvo en Galicia, donde subió una décima. Los mayores descensos se dieron en Aragón, Cantabria, Castilla y León, Madrid, Comunidad Valenciana y Extremadura, todas ellas con caídas de seis décimas.
A cierre de enero, todas las comunidades presentaban tasas interanuales positivas. Las más elevadas corresponden a Castilla-La Mancha (7,2%), Galicia (6,8%) y La Rioja y Castilla y León, ambas con una tasa del 6,7%.
Por contra, las comunidades que muestran los repuntes interanuales de precios más moderados son Canarias, con una tasa del 5,5%; Madrid (5,6%) y Asturias y Cataluña, ambas con tasas del 5,9%.
Nueva base 2021
Estadística ha destacado que con la implantación de la nueva base se incorporan novedades metodológicas que mejoran la precisión del indicador, así como cambios en la composición de la cesta de la compra y una nueva estructura de ponderaciones.
El cambio de base es un proceso que se realiza cada cinco años para renovar el IPC mediante su adaptación a los cambios en las pautas de consumo de los hogares y la incorporación de mejoras metodológicas.
Así, el IPC base 2021 incorpora nuevos tratamientos para el seguimiento de los precios del vestido y para el procesamiento de la falta de precio, y actualiza la relación de subclases, de forma que desaparecen del cálculo del IPC 24 subclases y se incorporan dos nuevas.
Los cambios más destacables en la configuración de la cesta son la incorporación de las mascarillas higiénicas y la suscripción a la prensa 'online'. De la cesta desaparecen artículos como el reproductor de imagen, el reproductor portátil o el compact-disc y el DVD, entre otros.
Como consecuencia de estos ajustes, la cesta de la compra del IPC base 2021 pasa a tener 955 artículos (de los cuales 462 son de recogida tradicional y el resto se recogen mediante 'scanner data'), frente a los 977 de la base anterior (con 480 de recogida tradicional).
El IPC base 2021 incluye una nueva estructura de ponderaciones que representa de forma más precisa las pautas de consumo de los hogares, según el INE.
Estadística ha aplazado la incorporación del mercado liberalizado de la electricidad en el cálculo del IPC hasta obtener la información que han de suministrar las compañías eléctricas con un suficiente nivel de detalle y con los criterios técnicos necesarios.