La Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional convocó un paro indefinido desde el pasado día 14 de marzo, una huelga que, pese a que no se sumaron las principales asociaciones, ha traído efectos negativos sobre la distribución de algunos productos.
En la última reunión mantenida este miércoles, entre representantes de las principales patronales, asociaciones de transportistas, Gobierno, Guardia Civil y Policía Nacional, se ha abordado el tema y la mayoría del sector quiere trabajar. Temen incidentes, por lo que estudian cómo limpiar nudos logísticos de piquetes.
Entre los efectos de la huelga de transportistas, se encuentra el del problema de distribución de algunos productos, el enfado del sector o la paralización de la actividad en algunos puertos.
En Murcia, la huelga ha impedido la salida del grano desde el puerto de Cartagena, lo que ha ocasionado no poder alimentar a los animales previstos.
En la línea de la falta de suministros se encuentra la planta de Ford Almussafes, que ha tenido que ampliar el calendario del ERTE debido a la inestabilidad en la llegada de componentes y semiconductores, algo que la propia dirección reconoce que se ha agravado con la guerra en Ucrania y la huelga de transportistas.
Además del puerto de Cartagena, los de Vigo, Celeiro y A Coruña se han visto afectados por la huelga de transportistas y el amarre de la flota: se han desechado ya 100 toneladas de pescado porque no se puede distribuir el mismo.
Pese a que las principales asociaciones no apoyaron el paro indefinido, las reivindicaciones del sector son similares y consideran que la situación para las empresas es grave, así como las condiciones "precarias" de los trabajadores que denuncian las plataformas.
Además, fuentes del sector aseguran que muchos trabajadores han parado camiones "por miedo a los piquetes". Esto se traslada a muchas empresas que paralizan la actividad por "seguridad" de sus trabajadores.