RESPONDE A LAS PETICIONES DE LOS ACREEDORES

Grecia prepara un paquete de reformas de 12.000 millones de euros

En Atenas, Tsipras protagoniza desde anoche un frenesí de reuniones a nivel político. El primer ministro heleno intenta conseguir el mayor respaldo posible en casa. Después de sentarse con los partidos de la oposición, Tsipras ha convocado a sus ministros para cerrar la oferta que marcará el futuro del país, y no se descarta que esa oferta sea bastante peor para griegos que la que se rechazó en el referéndum del pasado domingo.

ondacero.es

Madrid | 09.07.2015 20:10

Tsipras conversa con su ministro del Interior Nikos Vutsis | agencias

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, prepara un paquete de reformas de 12.000 millones de euros, 4.000 millones más de lo previsto antes del referéndum del pasado domingo, como contrapartida del tercer rescate que ha solicitado formalmente a sus socios del euro.

Estas medidas ya las ha compartido con el resto de dirigentes políticos griegos en una maratón de reuniones que empezaba con el Presidente de la República.

Así, el primer ministro heleno decía que "vamos a presentar nuestras propuestas, con reformas creíbles y compromisos claros. Este es nuestro objetivo". En la conversación, el presidente griego le ha mostrado su satisfacción por el resultado del referéndum. "Ha servido, -dice-, para reiniciar las negociaciones".

Pavlopoulos dice que "tienen un único objetivo: la permanencia del país en Europa y la eurozona". El Gobierno se muestra optimista ante un próximo acuerdo, y también la oposición. Así lo ha manifestado el líder de To Potami, Stavros Theodorakis, quien asegura que "nos estamos esforzando para lograr un acuerdo antes del domingo".

Vangelis Meimarakis, líder de Nueva Democracia, cree que "Grecia debe llegar a un acuerdo para seguir en el euro".

Los periódicos hablan del posible acuerdo y de las duras reformas que tendrán que acometer para evitar el Grexit, "será un fracaso colectivo", dice el Comisario Europeo de Asuntos Económicos, y asegura que quien tiene "la llave para evitarlo" es Tsipras.