El conjunto de la deuda pública española en relación con el PIB se encuentra a un punto del objetivo del Gobierno cifrado para 2015 en el 98,7 % del PIB.
La deuda neta de activos financieros frente a las públicas de la administración central fue de 786.145 millones (equivalente al 72,9 % del PIB), la de las comunidades autónomas sumó 250.237 millones (el 23,2 % del PIB) y la de las corporaciones locales fue de 37.928 millones (el 3,5 % del PIB).
La Seguridad Social tuvo un saldo positivo de 21.473 millones (el 2 % del PIB).
Los datos del Banco de España del segundo trimestre del año reflejan que la deuda del conjunto de las administraciones creció ligeramente el 0,63 % respecto al primer trimestre del año, y mientras la del Estado bajó el 0,65 %, la de las comunidades autónomas subió el 4,05 % y la de los ayuntamientos descendió el 1,38 %.
El ratio de deuda pública respecto al PIB del conjunto de las administraciones bajó tres décimas respecto a la del primer trimestre. La de la Administración Central descendió en 1,2 puntos frente al registro que supuso entre enero y marzo, la de las Comunidades Autónomas aumentó en 7 décimas, y la de las corporaciones locales subió en una décima.
El Banco de España refleja que la deuda pública española en proporción con el PIB se encuentra en el mismo nivel que tuvo en el cuarto trimestre de 2014, cuando también supuso el 97,7 % de la economía.
Por comunidades autónomas, la más endeudada en el segundo trimestre de 2015 fue Cataluña, con 66.813 millones (el 32,8 % del PIB), seguida de la Comunidad Valenciana, 40.085 millones (el 39,6 %); de Andalucía, 29.822 millones (el 20,7 % del PIB); de Madrid, 26.341 millones (13,1 % del PIB); Castilla-La Mancha, 13.138 millones (el 34,1 % del PIB), y de Castilla y León, 10.386 millones (el 18,9 %). La autonomía menos endeudada en el segundo trimestre fue La Rioja, con una deuda de 1.390 millones de euros, lo que supone el 17,4 % de su PIB.