La Generalitat traslada 53 de las 97 piezas de arte a Sijena
Las 53 piezas del monasterio oscense de Sijena que permanecían en el Museo Nacional de Arte de Cataluña han llegado a Aragón en cumplimiento con la ordena de un juzgado Oscense. A su vez, la Generalitat ha denegado el traslado de las 44 obras del cenobio depositadas en el Museo de Lleida.
Las 53 piezas del monasterio oscense de Sijena que permanecían en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) han llegado a Aragón, tras un acuerdo con la Generalitat, que a su vez ha denegado el traslado de las 44 obras del cenobio depositadas en el Museo de Lleida.
Según ha informado la vicepresidenta y portavoz del Govern, Neus Munté, las obras del MNAC se han entregado en el monasterio de Sijena, el punto de entrega que ha marcado el juzgado de Huesca.
Se trata de unas piezas hasta ahora depositadas en los almacenes del MNAC y que "nunca han sido expuestas a causa de su escaso valor artístico", ha recordado la vicepresidenta del Govern.
Munté ha justificado la negativa a la entrega de las obras depositadas en Lleida "dado que no han finalizado los procedimientos legalmente requeridos por la normativa de patrimonio cultural".
Ha recordado Munté que los 44 bienes de Lleida que no tienen autorización de la Generalitat para ser trasladados "forman parte de una colección catalogada por la Ley de patrimonio cultural catalán, motivo por el cual, para poder ordenar el traslado, se deben cumplir una serie de trámites previstos por dicha normativa".
La ley catalana de museos y patrimonio obliga a seguir una serie de trámites como, entre otros, la reunión de la Junta de Museos, un informe de las mismas entidades que aconsejaron su catalogación, además de un expediente del Departamento de Economía y la aprobación por parte de los consorcios museísticos.
El propio conseller de Cultura catalán, Santi Vila, ha informado de que ya se ha pedido al Departamento de Economía que "incoe un expediente para descatalogar estos objetos", lo que hará posible que el Govern acuerde, si considera oportuno, acabar de cumplir la sentencia de Huesca.
Ante la negativa de devolver las 44 piezas de Lleida, el gobierno aragonés ha vuelto a pedir hoy a la titular del Juzgado de Huesca que exija el cumplimiento de la sentencia que obliga a la Generalitat a devolver las 97 piezas "en sus justos términos" y que establezca las medidas coercitivas que considere necesarias para ello".
La consejera de Cultura aragonesa, Mayte Pérez, ha dicho esta mañana que "el tiempo de la voluntad política pasó y estamos en otro asunto, que es el cumplimiento del estado de derecho".
Munté ha remarcado que es imposible cumplir el redactado de la sentencia del juzgado de Huesca porque "la ley catalana de patrimonio obliga a una serie de trámites; y además la propia ley de enjuiciamiento civil dice que los cumplimientos de las sentencias se hacen siempre que no lesionen otras legislaciones, como sería este caso".
Con el traslado de las 53 piezas del MNAC, la Generalitat ha dado cumplimiento, según el decreto, a "la ejecución provisional de la sentencia dictada por el juzgado número 1 de Huesca".
Estas piezas, según sostiene el gobierno catalán, fueron adquiridas por la Generalitat a las monjas de la orden de San Juan de Jerusalén mediante contratos de compraventa del 28 de enero de 1983 y 17 de diciembre de 1992, y por el MNAC, el 20 de junio de 1994.
Técnicos de la administración aragonesa han firmado los documentos de recepción de las cajas en las que han sido trasladadas las piezas, que serán desembaladas durante las próximas horas para una comprobación de su estado.
La administración aragonesa ha habilitado los antiguos dormitorios del Monasterio de Sijena para ubicar estas piezas.
La consejera de Educación, Cultura, Mayte Pérez, y el director general de Cultura y Patrimonio, Nacho Escuín, han estado presentes a la llegada de este patrimonio, que regresa a Sijena por orden del juzgado de instrucción número 1 de Huesca.
En un intento de calmar los ánimos, Vila ha dicho que el caso sobre los bienes de arte del monasterio aragonés de Sijena es "un conflicto de legislación civil en relación a si una compraventa se hizo de buena fe o no, y no un conflicto entre pueblos".
El último capítulo del conflicto se ha producido en Lleida, donde el Consorcio del Museo de Lleida ha interpuesto una demanda civil contra la orden de monjas sanjuanistas del monasterio de Sijena para reclamar los gastos de conservación y mantenimiento en depósito durante 80 años de las obras adquiridas por la Generalitat.
"Este nuevo procedimiento judicial se basa en el derecho de retención que contempla el Derecho Civil catalán y a que el Consorcio, como poseedor de buena fe de las piezas durante años y depositario necesario, las ha preservado y conservado y, por tanto, tendría derecho a retenerlas hasta que le sean devueltos los gastos de mantenimiento, conservación o mejora que se hayan derivado de esta posesión", ha explicado la abogada de la Diputación leridana, que integra el consorcio.