HALLAZGO ARQUEOLÓGICO

Descubren la primera representación de una "pizza" en un mural de Pompeya pintado hace 2.000 años

El dibujo ha sido encontrado durante las excavaciones en el patio de una casa de Pompeya, donde aparece una especie de focaccia de frutas como granada, dátiles y especias.

ondacero.es | Agencias

Madrid | 28.06.2023 07:30

Imagen del fresco encontrado en Pompeya donde aparece lo que podría ser un plato antepasado de la actual pizza | EFE/Parque Arqueológico De Pompeya

Un grupo de arqueólogos han hallado un sorprendente descubrimiento en las nuevas excavaciones en Pompeya, ciudad del sur de Italia destruida por el volcán Vesubio en el 79 d. C. En los trabajos realizados en un mural situado en el patio de una casa, se ha encontrado un fresco que representa una naturaleza muerta.

En el fresco pompeyano pintado hace 2.000 años aparece lo que podría ser un plato antepasado de la actual pizza. Según informa el equipo arqueológico en un comunicado, no es una pizza como la conocemos actualmente porque "faltan algunos de los ingredientes más característicos, como son el tomate y la mozzarella", pero sí podría "ser un lejano antepasado del plato moderno, elevado a Patrimonio de la Humanidad en 2017 como arte tradicional del pizzero napolitano".

Focaccia con frutas: granada, dátil y especias

En el mural aparece una copa de vino junto a una bandeja de plata donde se representa una 'focaccia', "un tipo de pan plano que sirve de soporte a varias frutas, identificable es una granada y quizás un dátil, sazonado con especias o con una especie de pesto".

Los arqueólogos explican que "este tipo de imágenes, conocidas en la antigüedad con el nombre de 'xenia', se inspiraron en los obsequios que se ofrecían a los invitados, según una tradición griega que se remonta a la época helenística (siglos III-I a. C.)".

Se reanudaron las excavaciones el pasado enero

El fresco fue encontrado en el atrio de una casa en la Insula 10 de Regio IX, que tiene una panadería anexa, ya explorada parcialmente entre 1888 y 1891 y cuyas investigaciones se reanudaron en enero pasado.

Las estructuras excavadas en el siglo XIX y parcialmente expuestas ya hacían suponer la presencia de un gran atrio con la clásica sucesión de habitaciones en el lado este y, en el lado opuesto, la entrada al sector productivo del horno.