Según han indicado a Efe fuentes de la investigación, ambos subieron a la habitación para pasar la noche juntos. Al parecer, en un momento dado la madre, una brasileña de 18 años, se durmió y cuando se despertó comprobó que ni el profesor ni la niña estaban en la habitación.
Por ello, decidió mirar en otra de las habitaciones del piso compartido y vio al profesor haciendo tocamientos a la pequeña, por lo que se puso a gritar.
Fue entonces cuando el hombre arrojó supuestamente a la niña por la ventana desde un primer piso y clavó a la madre un cristal en el cuello.
La niña permanece ingresada en estado grave en el hospital vizcaíno de Cruces, centro al que será trasladada su madre para que pueda estar con su hija.