El comercio de Beasain pondrá en marcha una experiencia de racionalización de horarios durante cuatro semanas. A partir del próximo 1 de febrero, los comercios adheridos a esta iniciativa cerrarán antes sus comercios. Se quiere animar así a los "beasaindarras a realizar sus compras en la localidad y, con ello, generar conciencia sobre el uso responsable de los horarios y la conciliación". Las tiendas participantes colgarán en sus escaparates un sello con el horario experimental y repartirán folletos con información básica.
Difícil conciliar
La alcaldesa de la localidad, Leire Artola, reconoce que "conjugar la vida laboral con la personal resulta más complicado en el caso de los profesionales del comercio y servicios, ya que el horario de atención al público condiciona de manera indudable su vida personal. Es por ello que esta experiencia nos debe concienciar de la importancia que tiene comprar y consumir en Beasain variando levemente nuestros hábitos horarios". Los comerciantes consideran que es importante que "los clientes sean conscientes de que es una prueba que puede hacer que otras localidades tomen nota y poco a poco se vayan sumando a esta iniciativa".