Agentes de la UDAIFF (Unidad de Análisis e Investigación de Fiscal y Fronteras), observaron en este almacén, situado en Pamplona, cómo se realizaba la carga y descarga de paquetes que contenían productos alimenticios sin las medidas higiénicas ni sanitarias necesarias para su correcta conservación. En este mismo almacén pudieron comprobar cómo se cocinaban alimentos sin las medidas higiénicas pertinentes, con el riesgo que ello puede suponer para la salud de los consumidores.
Además, los agentes también pudieron constatar cómo en el interior de este almacén se estaba realizando actividad de transporte de paquetería sin tener la licencia para ello, ha indicado en una nota la Guardia Civil.
Una vez fueron detectadas todas estas irregularidades, los agentes de la Unidad de Análisis e Investigación de Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil de Navarra contactaron con el Servicio de Inspección de Sanidad del Ayuntamiento de Pamplona, quienes certificaron que los productos cárnicos no pueden ser puestos a la venta al público, por lo que procedieron a su retirada para su posterior destrucción.
Con motivo de las irregularidades detectadas, los agentes del Servicio de Fiscal y Fronteras formularon nueve actas de denuncia por incumplimientos al Real Decreto de Impuestos Especiales, por ejercer una actividad sin estar dado de alta, por vender productos desconociendo su origen, por almacenarlos en lugares inadecuados y por la conservación inadecuada de alimentos ultracongelados.
Además de lo anterior, significar la localización de un total de 1.177 litros de diferentes bebidas derivadas, destacando la localización de anises y licor de manzanas preparados para ser puestas a disposición del consumidor final, careciendo de la correspondiente marca fiscal y sin haber pasado los controles sanitarios pertinentes.
Las multas de las denuncias por incumplimiento del Real Decreto 1165/95 de Impuestos Especiales oscilan entre 600 a 30.000 euros. Y de las demás actas de denuncia que se formularon a otros Reales Decretos y Decreto Foral sus multas oscilan entre 150 y 6.000 euros, además de la posibilidad del cierre del establecimiento.