Alberto Alecha: "Agricultores y ganaderos no queremos zancadillas de los gobiernos"
Agricultores y ganaderos reivindican en Pamplona que se les "permita" ser "competitivos" frente a productos no europeos.
Unos 56 tractores han realizado este martes una nueva 'tractorada' por las calles de Pamplona y su comarca para reivindicar que "se nos permita ser competitivos respecto a lo que se produce fuera de Europa" y garantizar de este modo la "supervivencia" del sector primario.
Así lo ha indicado el presidente de la Asociación Semilla y Belarra, Alberto Alecha, en Onda Cero Navarra. A la marcha de tractores se han unido también coches y agricultores procedentes de otros territorios, como la Asociación Treviño y Álava por el campo (ATACA).
"En Europa tenemos unas reglas que nos parecen bien para proteger el medio ambiente, para proteger al consumidor, para proteger a la gente que trabaja en el campo, pero se permite la entrada de productos de fuera que no se les exige lo mismo", ha criticado Alecha, que ha añadido que "aquí estamos en clara desventaja". "Es como si estuviéramos jugando una partida a las cartas: nosotros con todas las restricciones y ellos con todos los comodines", ha manifestado.
Durante la primavera, en toda Europa los agricultores "hemos hecho unas demandas sabiendo que son pasos costosos de dar". "No implica sólo la reglamentación que tenemos en Navarra, no sólo la de España, sino de toda Europa, y cambiar lo que nos está desangrando sabemos que es costoso y largo", ha subrayado.
Tras añadir que "sabemos que cuesta tiempo", ha remarcado que "hemos dejado un tiempo de reflexión y ahora volvemos a recordar a los políticos y a la sociedad que estamos luchando no sólo por la supervivencia de la vida en el campo, sino por la soberanía alimentaria". "Me temo que va a haber que seguir recordando a la sociedad y a los políticos que no vamos a sobrevivir. Si ese es su fin, que lo digan claramente, porque lo están siguiendo", ha criticado.
Alecha ha destacado "toda la burocracia" que conlleva ser agricultor o ganadero en la Unión Europea. Según ha subrayado, "hay un mapa donde se indican las zonas no productiva", pero "no encontrábamos" el de este año a pesar de que "tenemos que planificar nuestros cultivos". "La respuesta que nos dieron cuando hicimos la consulta al Departamento -de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra-, fue que eso era competencias de Madrid. Consultaron al ministerio y nos dijeron que esa mapa creían que iba a aparecer en febrero", ha dicho, tras incidir en que "tenemos que planificar las cosechas, las siembras, para cumplir la normativa que no sabemos cuál es".
"Va cambiando la normativa y nos la imponen a posteriori. Está muy bien que haya que cuidar la naturaleza, a los trabajadores del campo, a los alimentos, pero no sabemos cuáles son las reglas. Los pasos que se dan, se dan a posteriori y siempre son más restrictivos. En Europa se ponen unos mínimos, en Madrid se ponen un poco más. En Navarra o en cualquier provincia se da su propia interpretación y generalmente es un poco más restrictiva. Cada vez estamos más atados. No decimos que no estemos a favor de esas restricciones, pero que se consensúen con los que estamos trabajando día a día, cuidando el medio ambiente, produciendo alimentos, y que luego se exija lo mismo a los países que vienen de fuera", ha reivindicado.
A su juicio, "los avances han sido muy pequeños: se pararon los tratados de Mercosur, se paró un montón de normativa que estaba en marcha, pero en cuanto ha pasado un poco de tiempo, no sé si piensan que nos hemos olvidado, han aprobado Mercosur". Preguntado sobre cómo afectará a Navarra este acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur, ha respondido que "como siempre, no tenemos toda la información". "Ayer salió el ministerio diciendo que la importación de carne iba a ser un filete por ciudadano. No tengo información para rebatirla, pero creo que si un importador o un distribuidor de carne va a conseguir la carne más barata afuera, pues va a venir aquí", ha dicho.
Lo "malo", ha añadido, es que "el consumidor lo tiene cada vez más difícil para encontrar de dónde viene esa carne, cómo se han tratado esos animales, con qué se han tratado y las condiciones del trabajador que los ha estado cuidando".